República Dominicana desmantela red que vendía niños a extranjeros
Detuvieron a seis personas, entre ellas una pareja de italianos.
Autoridades dominicanas detuvieron a seis personas, entre ellas una pareja de italianos, acusadas de formar parte de una red que se dedicaba a vender niños recién nacidos a extranjeros, informó este domingo la Procuraduría General.
Entre los detenidos figuran los esposos italianos Rodolfo Subrizi y Lucila Magnanti, quienes supuestamente pretendían salir de República Dominicana con un bebé de cuatro meses, por el cual, según las investigaciones, habrían pagado la suma de 10 mil euros, según un comunicado de la Procuraduría.
La información precisó que la detención de los implicados fue posible tras una labor de inteligencia dirigida por el magistrado Jonathan Baró Gutiérrez, titular de la Procuraduría Especializada Contra el Tráfico Ilícito de Migrantes y la Trata de Personas, y otras autoridades.
A través de esa operación, las autoridades daban seguimiento a los también detenidos Gabriela Isabel Peralta Gómez, madre del menor, y Regalado Guzmán Cordero, quien hacía posible la adjudicación del niño a la pareja extranjera, realizando los trámites requeridos en diversas instituciones, según la versión oficial. Igualmente, fueron detenidos Rosanna de Lucas García y Fabio Antonio López Alcequiez, a quienes se les imputa hacer el contacto directo con los extranjeros que llegaban al país caribeño a "comprar" los niños.
Esa red, que funcionaba en el municipio de Cabrera, en la provincia María Trinidad Sánchez (noreste), tenía como "modus operandi" establecer el contacto y seguimiento a ciudadanos de otros países a quienes ofertaban la posibilidad de adquirir niños recién nacidos o aún estando la madre en proceso de gestación.
Mediante acuerdos, los interesados se hacían responsables de los gastos de la maternidad y, a la vez, pagaban 10mil euros, explicó Baró, detallaron los investigadores.
Contra todos los implicados las autoridades solicitaron como medida de prisión preventiva, aunque solo Lucas García, Peralta Gómez y Guzmán Cordero fueron enviados a la cárcel por tres meses.