Para el ejército sirio el hambre es un arma de guerra: AI
Al menos 60% de los civiles bloqueados en este campamento se encuentran desnutridos, y sólo han comido unas pocas frutas y verduras desde hace meses.
El ejército sirio utiliza al hambre como "arma de guerra", en particular en el campo de refugiados palestinos de Yarmuk en Damasco, denunció Amnistía Internacional (AI), en un informe publicado este lunes.
Casi 200 personas han muerto allí a causa de las privaciones, de las cuales 128 de hambre, desde que el ejército sirio reforzara su cerco en julio de 2013, sitiando e impidiendo la entrada de alimentos y medicamentos para miles de civiles, según AI.
"La vida en Yarmuk se ha vuelto cada vez más insoportable para los civiles que, desesperados, mueren de hambre, atrapados en un ciclo de sufrimientos sin salida posible", denunció en un comunicado Philip Luther, responsable de AI para Oriente Medio.
El sitio de Yarmuk es sólo "el más mortífero de una serie de bloqueos armados en otras zonas civiles, impuestos por las fuerzas armadas sirias o grupos armados de la oposición a unas 250 mil personas a través de todo el país", añade la ONG.
El ejército sirio sitia Yarmuk, en el sur de Damasco, para intentar desalojar a combatientes rebeldes y así han convertido a este barrio de 170 mil habitantes, con una intensa vida comercial y cultural, en un campo de batalla en el que siguen atrapados 20 mil civiles, según la agencia de la ONU encargada de la ayuda a refugiados palestinos (UNWRA).
Según AI, las fuerzas gubernamentales bombardean regularmente los edificios civiles en Yarmuk, lo que constituye "un crimen de guerra".
Al menos 60% de los civiles bloqueados en este campamento se encuentran desnutridos, y sólo han comido unas pocas frutas y verduras desde hace meses.
"Las fuerzas sirias cometen crímenes de guerra utilizando el hambre de los civiles como un arma de guerra", insiste Luther, señalando "testimonios desgarradores de familias que se vieron obligadas a comerse a sus gatos y perros, y de civiles baleados por francotiradores cuando salían a buscar comida".
Entre los muertos, 18 son niños y bebés, y los hospitales no disponen del material más básico, al punto que algunos han tenido que cerrar, según AI.