España facilita nacionalización de descendientes de judíos expulsados en 1492
En un deseo de reparar "un error histórico".
El gobierno español, deseoso de reparar "un error histórico", adoptó este viernes un proyecto de ley para facilitar la nacionalización de los descendientes de los judíos sefardíes expulsados del país en 1492.
España ya había anunciado que nacionalizaría a las personas que puedan demostrar su origen sefardí, comunidad descendiente de los judíos expulsados en 1492 cuando los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, ordenaron que se fueran del país todos los que rechazasen convertirse al catolicismo.
Pero actualmente, España sólo autoriza a los ciudadanos de un pequeño grupo de países, principalmente de América Latina, a adoptar la nacionalidad española sin abandonar la propia.
La condición de renunciar a la nacionalidad de origen desaparece en el proyecto de ley aprobado el viernes por el gobierno conservador de Mariano Rajoy. "La norma permitirá la doble nacionalidad", afirmó la vicepresidenta y portavoz del ejecutivo. Los candidatos tendrán tres años para presentar su solicitud tras la entrada en vigor de la ley, precisó.
"Les aseguro que la inmensa mayoría de los españoles, poco importa su sentido de voto, estén en el gobierno o en la oposición, coinciden con esta afirmación de que hemos cometido un error histórico hace cinco siglos", había afirmado el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, al anunciar el proyecto en febrero.
Es difícil establecer el número de personas que podrían verse concernidas por esta medida, pero según varias evaluaciones podrían alcanzar los tres millones. Según los historiadores, unos 200 mil judíos vivían en España antes de las expulsiones. Los que se negaron a marcharse o a convertirse fueron ejecutados o quemados vivos.
El decreto de La Alhambra de 1492, responsable de la expulsión de sefardíes de España, estuvo en vigor oficialmente hasta 1967.