Este lunes por la madrugada se registró el que sería el octavo fallecimiento por medicina contaminada en la clínica de Petróleos Mexicanos (Pemex) en Villahermosa, Tabasco.
Se trata de Javier Acosta Gil, cuyo cuerpo fue entregado a sus familiares este lunes por la mañana; la familia denunció el hecho ante la Fiscalía General del Estado (FGE), por lo que los peritos acudieron a la clínica para llevarse el cadáver.
- Cabe señalar que los peritos de la FGE únicamente realizan la necropsia; los análisis los entregan a la Fiscalía General de la República (FGR) para que sean las autoridades del fuero federal quienes investiguen los fallecimientos en la clínica de Pemex.
Por su parte, Petróleos Mexicanos (Pemex) sólo reconoce la muerte de 6 personas, ya que uno de los fallecidos aparentemente sufrió una infección por un catéter contaminado. Tampoco la muerte de Javier Acosta Gil ha sido reconocida por Pemex.
Medicina contaminada
A finales del mes pasado, 67 derechohabientes que recibían tratamiento de hemodiálisis en el nosocomio de Pemex, en la capital tabasqueña, fueron afectados por el suministro de la medicina heparina sódica contaminada, la cual tenía una bacteria.
Fermacéutica se deslindó de medicina contaminado
A través de un comunicado, la farmacéutica PiSA se deslindó de la medicina contaminada que ha cobrado la vida de varias personas a quienes se les hacía hemodiálisis en el Hospital Regional de Pemex de Villahermosa, Tabasco.
La dirección médica de la farmacéutica precisó que luego de detectarse anomalías con esta medicina denominada heparina sódica (que contiene la bacteria Klebsiella pneunomiae y que afectó a pacientes de dicho nosocomio) se implementaron los protocolos de farmacovigilancia correspondientes.
En la evaluación que realizó PiSA se detectó que el medicamento utilizado por el hospital de Pemex en Tabasco contiene algún tipo de Heparina pero no alcohol bencílico ni cloruro de sodio, sustancias que forman parare de la formulación de heparina sódica de la firma.