Suspenden plantación en Campeche por dañar selva
Realizaban actividades de cambio de uso de suelo sin la autorización correspondiente.
En Campeche, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) suspendió de manera total temporal una plantación de palma africana aceitera por dañar 107.04 hectáreas de selva y realizar actividades de cambio de uso de suelo sin la autorización correspondiente que expide la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
Dicha acción fue resultado de una visita de inspección en materia forestal que se realizó al establecimiento los días 10 y 11 de abril, con el propósito de verificar el cumplimiento de la legislación ambiental para el establecimiento de plantaciones de palma africana y construcciones de drenes, en el municipio de Palizada, Campeche.
Cabe mencionar que a partir de cultivos de palma africana se obtiene un aceite natural que sirve para generar un combustible natural llamado biodiesel, una fuente de energía para ser utilizado como sustituto de gasóleo en los motores de comprensión (Diésel), aunque también puede ser empleado para la combustión en calderas de calefacción.
Asimismo, es de destacar que una hectárea para la agricultura de la palma africana necesita nueve millones de litros de agua en promedio para alcanzar su cosecha, por lo que se considera que tiene un alto costo ambiental para su producción.
A criterio de especialistas de la Profepa, esta clase de plantaciones propicia la pérdida de cobertura vegetal así como la destrucción del hábitat natural de la fauna existente en el ecosistema, ocasionan la sensible disminución de servicios ambientales tales como; infiltración de agua, captura de dióxido de carbono y generación de oxígeno, entre otros.
Durante las tareas a cargo de la Subprocuraduría de Recursos Naturales se supervisaron las 1,933 hectáreas con que cuenta la empresa y se comprobó la afectación de 107.04 hectáreas de selva por cambio de uso de suelo, sin contar con la autorización forestal correspondiente en dos predios; “Villa Rosa” y “Caobal”.
Dicha modificación, afectó la vegetación natural de selva alta y mediana subperennifolia, cuyos ecosistemas son considerados frágiles, por la importante diversidad biológica de flora y fauna silvestres que albergan.