En Nuevo León, María sobrevivió al coronavirus COVID-19, y ahora desea donar su plasma para que otros enfermos de esta pandemia salgan adelante igual que ella, ya que esta caída de salud le cambió la vida.
No supo en qué momento se contagió; un día después de que inició con síntomas fue diagnosticada con coronavirus. Sólo dos días estuvo en el hospital COVID, en la ciudad de Monterrey, donde le dijeron que de ser necesario le harían una transfusión de plasma, pero esto no fue necesario.
Tras la recuperación, se hará una segunda prueba para confirmar que ya no tiene la enfermedad y así poder donar:
(¿Y cómo es el trámite, le piden autorización?) A nosotros nos pidieron primero como voluntario, ya nada más que se confirme el diagnóstico que nos van hacer de la prueba. Avanzamos y nos dan una hora y nada más." María, paciente recuperada de COVID-19.
Con temor, regresó a su casa
Pues aquí estaba aislada en un cuarto y mi familia en el resto de la casa, pero también me dijeron: 'Oye, nos vamos, nos llevamos a los niños, te quedas sola'. Les digo: 'Es que ellos ya estuvieron en contacto conmigo, yo creo que para qué empeorar esto; si ya están contaminados, van a contaminar a alguien más, y se va hacer esto más grande, mejor nos quedamos aquí'. Cuando yo salí del hospital, la verdad, yo tenía miedo de volver a recaer, no voy a tener el tiempo de regresar, pero sí me vi un poco tranquila porque el doctor me dijo que poco a poco iba a ir disminuyendo y que estuviera haciendo las vaporizaciones". María, paciente recuperada de COVID-19.
Asegura que cuando la segunda prueba resulte negativa, comenzará a donar su plasma para ayudar a más personas que se han contagiado.