Elementos de la Procuraduría General de la República y de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) incineraron el martes cerca de cinco toneladas de drogas que fueron decomisadas en diversos operativos en Nuevo León.
La destrucción de los estupefacientes se llevó a cabo bajo la supervisión de efectivos castrenses en las instalaciones de la Séptima Zona Militar, en el municipio conurbado de Escobedo.
De acuerdo con la información de las fuerzas federales, la droga asegurada forma parte de 44 expedientes que se encuentran en proceso de investigación por parte del órgano interno de control de la PGR.
Se detalló que la droga incinerada fueron 4.8 toneladas de mariguana; 9.7 kilogramos de cocaína; más de 300 gramos de metanfetaminas; 46 unidades de pastillas sicotrópicas y tres pastillas denominadas éxtasis.
Los estupefacientes, recalcaron, fueron decomisados en las últimas semanas en varios operativos en la entidad que realizaron la policía federal, así como las corporaciones del estado y municipales, con el apoyo del Ejército Mexicano.