Se viraliza un oso en redes sociales luego de protagonizar un gracioso momento, cuando se pone a acariciar el cabello de una mujer en el estado de Nuevo León.
Este evento se viraliza debido a que las personas presentes lo toman con mucha calma y conviven con el oso como si fuera un gato o un perro. Todo esto se lleva a cabo mientras un grupo de personas se encuentran reunidas en un camino, y al parecer están esperando a otros más.
- Hecho registrado en San Pedro, Nuevo León.
No hay que tener miedo, para que él no lo sienta. ¡Le está acariciando el pelo! Mira, te habla, está chiquito, es un bebé, es juguetón, quiere jugar. Personas del video.
Entre el asombro de acariciar el cabello a la mujer, solo se escucha a un hombre que dice que se debe tener precaución, ya que una mordida del oso es peligrosa y tiene mucha fuerza.
Se viraliza este oso y las autoridades lanzan llamado
Inmediatamente después de que se viraliza este oso cariñoso, las autoridades de Nuevo León reaccionaron y emitieron una serie de recomendaciones a la población, remarcando la importancia ante eventos como éste.
Aunque ellos no quieren hacer daño, ¡jamás debes hacer lo siguiente!
Las autoridades de Nuevo León constantemente emiten anuncios sobre avistamientos de oso en la periferia de alguna zona urbana de la entidad; sin embargo, y debido al reciente video donde el animal se pone a acariciar el cabello de una mujer, se emitió lo siguiente.
- Mantener siempre la distancia y nunca dar la espalda
- No alimentarlos o no arrojarles comida
- No golpearlos
- No intentar fotografiarlos o videograbarlos
- No dejar a su alcance basura, ni intentes retirar la que hay si el animal ya la detectó
Resalta que tras el video viralizado, una de las acciones que resalta es cuando el animal se pone a acariciar el cabello de la mujer, y es que mientras usuarios y algunos de los que estaban en el momento lo vieron como un acto gracioso, ese momento pudo haber terminado en tragedia, ya que el oso pudo con su garra intentar tirar a la persona y atacarla, solo por mero instinto o hambre, de ahí la recomendación de no dar la espalda.