La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) interpuso un par de denuncias contra quien resulte responsable por abandonar desechos de residuos peligrosos biológico infecciosos en tiraderos de Nuevo León.
Primer caso:
En la localidad de Nacataz del municipio de García, se encontraron bolsas con el símbolo de RPBI (residuos peligrosos biológico infecciosos) con jeringas, agujas sin tapón, gasas y guantes con sangre; además de circuitos de hemodiálisis, batas desechables, contenedores de punzocortantes, bolsas de suero fisiológico y bolsas con lo que parecía ser sangre.
Segundo caso:
En la colonia Praderas de Agua Fría, dentro del Potrero el Toribeño del municipio de Apodaca, se encontraron 10 tambos cerrados, bolsas con jeringas y frascos de medicamentos.
El propietario del predio dijo que fueron descargados sin su consentimiento, por lo que dio aviso a las autoridades para realizar la inspección.
Los culpables podrían recibir una condena de 1 a 4 años de prisión.
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