Dan último adiós a rusas asesinadas en Tijuana

Decenas de personas, desde niños hasta ancianos acudieron a la Parroquia de Santa María estrella del mar para despedir a Yuliya Masney y Valeria Lechtchenko, además de acompañar a Igor Lechtchenko en este momento.

“Es una misa para recordar a mi esposa y a mi hija que en paz descansen. Se le invitó a todo mundo, a todo mundo, quien quiera acompañarnos. Alumnos de la escuela donde estaba mi hija, también mis alumnos, porque también imparto clases, llegaron mucha, mucha gente”, dijo Igor Lechtchenko, ex esposo de Yulia y padre de Valeria y Anastasia

Las cenizas de Yuliya y Valeria fueron colocadas al centro de la iglesia, así como un cuadro con el retrato de ambas. Mientras el sacerdote que ofició la misa señalaba que esto apenas era la punta del iceberg sobre la problemática que vive la sociedad, así mismo lanzo un llamado de luchar por la vida y defender la vida de los demás.

Familiares no pudieron viajar a Tijuana, pero amigos que conocieron a Yuliya, Valeria y al resto de la familia Lechtchenko, hicieron un llamado a las autoridades

“No nos competen las razones, ni es nuestra intención por supuesto, pretender juzgar los acontecimientos, hay tristeza y mucha, no solo Yuliya y Valeria son víctimas, también lo son Igor el padres y la misma Anastasia. Será difícil borrar esta pesadilla, pero si podemos tener sueños nuevos, que solo podrán ser realidad cuando el presidente de la república, el gobernador del estado de Baja California y el alcalde de Tijuana como autoridades nos aseguren hacer su parte para detener este flagelo”, expresó un amigo de la familia Lechtchenko.

Al final de la misa con una de las urnas en la mano Igor salió de la iglesia para agradecer el apoyo de los asistentes, quienes posteriormente soltaron los globos que llevaron para despedirse de ambas.

El padre de Anastasia, quien mató a su madre y hermana menor, dijo que no ha tenido tiempo de pensar en ella.