Detienen a Vicente Carrillo Fuentes en Coahuila
La captura de “El Viceroy” se llevó a cabo en Torreón.
Funcionarios anunciaron que fuerzas federales detuvieron al presunto barón de las drogas Vicente Carrillo Fuentes, líder del cartel de Juárez.
El aseguramiento del capo se llevó a cabo en la colonia Nueva San Isidro, en Torreón, Coahuila, tras un seguimiento puntual orquestado por la Policía Federal.
Al momento de la captura, quien fuera uno de los 122 objetivos de la Estrategia de Seguridad Nacional del gobierno federal, se identificó como Jorge Sánchez Mejía; sin embargo, al verse descubierto reconoció su identidad.
La aprehensión se dio tras un “discreto operativo”, sin que se efectuara un solo disparo. Fue detenido en compañía de Jesús Contreras Sánchez, quien presuntamente ejercía funciones de escolta. Se les aseguraron dos armas: una larga y una corta, así como equipo de comunicación y documentos diversos, los cuales están en poder del Ministerio Público de la Federación.
Carrillo es señalado como uno de los responsables de la violencia que envolvió a Ciudad Juárez principalmente entre 2009 y 2011, cuando su organización criminal batallaba contra el cártel de Sinaloa para lograr el control de una de las rutas clave para introducir drogas a Estados Unidos, disputa que dejó al menos 8 mil muertos.
El capo es hermano del fallecido Amado Carrillo Fuentes, apodado "el señor de los cielos" porque fue de los primeros en utilizar avionetas para transportar sobre todo cocaína a Estados Unidos, el principal consumidor de drogas del mundo.
El gobierno de México ofrecía una recompensa por la captura de Vicente Carrillo Fuentes de 30 millones de pesos y Estados Unidos de cinco millones de dólares.
Se trata de la segunda captura de un barón de las drogas en una semana, luego de que días atrás fuerzas federales detuvieran a Héctor Beltrán Leyva, considerado el líder del cartel que lleva sus apellidos.
Las detenciones han ocurrido en momentos en que el gobierno federal de México está bajo presión internacional ante la que parece una desaparición forzada de 43 normalistas.
La administración del presidente Enrique Peña Nieto, que asumió el poder en diciembre de 2012, ha capturado a varios capos narcotraficantes de alto perfil. El golpe principal ocurrió en febrero con el arresto de Joaquín "El Chapo" Guzmán, considerado el líder del cartel de Sinaloa.