Los seis balnearios de aguas termales ofertados como atractivos turísticos en el municipio de Ajacuba, Hidalgo, permanecen cerrados por la contingencia sanitaria del Covid-19 que enfrenta el país.
Con las leyendas de "cerrado hasta nuevo aviso" las albercas y toboganes se encuentran vacíos y sin bañistas desde hace tres semanas, obedeciendo a las medidas impuestas para frenar la propagación de posibles contagios del nuevo coronavirus (Orthocoronavirinae).
Ubicados en el corredor de balnearios Tula-Ajacuba, cuentan con la característica de aguas termales a más de 40 grados centígrados en promedio y estos días de Semana Santa se quedarán sin visitantes debido a la alerta en todo México por el Covid-19.
El de mayor dimensión es el balneario "Las Lumbreras", administrado por ejidatarios del municipio y quienes no ven la fecha para reanudar actividades.
Hidalgo cuenta con cerca de 110 balnearios, los cuales suelen lucir llenos en Semana Santa.
En Morelos nadan en ríos y canales por cierre de balnearios
Turistas y pobladores de Morelos encontraron en ríos y canales de la entidad una oportunidad para divertirse y refrescarse a pesar que las prohibiciones de salir a nadar a espacios públicos como medida para frenar los contagios de coronavirus.
La suspensión de actividades de parques acuáticos y balnearios provocó que algunas personas encontraran un escape del confinamiento en los ríos y canales del estado. Han sido vistas familias nadando y asoleándose en estos espacios en plena Semana Santa donde además de la recomendación de permanecer en casa, se pide a la población mantener la sana distancia.
En las paginas oficiales de los ayuntamientos de Morelos se comenzó a publicar la prohibición de nadar en estos lugares. El decreto local arrancó la semana pasada, sin embargo, los pobladores han hecho caso omiso. Ante ello, la Comisión Estatal de Seguridad (CES) implementó operativos aéreos con la finalidad de inhibir la presencia de bañistas.