El último ejemplar de oso polar en el Zoológico de León fue encontrado muerto la tarde del pasado jueves por visitantes del parque.
Shiver, como se llamaba el oso, tenía más de 10 años viviendo en León, Guanajuato, era originario de Estados Unidos donde nació en cautiverio hace 30 años, explicó la alcaldía.
La muerte probablemente se debe a causas naturales, aunque esto lo determinarán veterinarios que realizan estudios al cuerpo del animal.
José Alberto Wong Dueñas, quien se encontraba de visita el pasado jueves en el zoológico, observó que el oso polar estaba inmóvil, flotando en el agua, por lo que dio aviso a los guardias y empleados del lugar.
El año pasado, el médico zootecnista del zoológico, Roberto Pacheco Mendez, dijo que la salud de Shiver era buena y que por lo general esa especie tiene una esperanza de vida de 30 años.