El fiscal general del Estado de México, Alejandro Gómez, dijo que el presunto agresor de la niña Valeria, José Octavio Sánchez Razo, se suicidó y descartó que se trate de un asesinato.
Los hechos:
El funcionario estatal reveló que los internos cuentan con cuerdas y cordones para tender su ropa, material que Sánchez Razo utilizó para suicidarse.
Las entrevistas con los custodios y los tres internos, dijo, revelan que la última ronda de los custodios fue a las cuatro de la mañana. Entre las cuatro y las cinco, uno de los internos fue al baño y notó que Octavio se encontraba en posición anormal con un lazo alrededor del cuello amarrado a los barrotes de la ventana, por lo que llamó al custodio.
El custodio, a su vez, llamó a la doctora en turno, quien verificó que el presunto agresor no tenía signos vitales.
- Asimismo, el fiscal aseguró que las investigaciones continúan para esclarecer los hechos.
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