Este fin de semana, aproximadamente 200 jóvenes se olvidaron de la pandemia del COVID-19 y armaron una fiesta de cumpleaños, en el Fraccionamiento Croc de Aragón, por lo que tuvieron que ser dispersados por elementos de seguridad del municipio de Ecatepec, en el Estado de México.
Cerca de 200 jóvenes que ingerían bebidas alcohólicas durante una fiesta celebrada en el estacionamiento del fraccionamiento Croc Aragón, a pesar de las disposiciones de las instituciones de salud por la contingencia sanitaria que se vive a nivel mundial por el coronavirus, permanecían hacinados al interior del inmueble, que acondicionaron con lonas y en el que, a través de la ventana de uno de los departamentos se expendían bebidas alcohólicas.
Era una supuesta fiesta de cumpleaños
Al lugar arribó personal de diversas áreas de seguridad ecatepense como Normatividad de la Dirección de Desarrollo Económico, Protección Civil, Desarrollo Urbano y Seguridad Pública y al notar la presencia de las autoridades, algunos asistentes arrojaron botellas y latas de cerveza con otras bebidas, para tratar de disuadir a los funcionarios públicos y poder continuar con el festejo de una supuesta fiesta de cumpleaños.
Tras entablar diálogo con quien se ostentó como uno de los organizadores de la supuesta fiesta de cumpleaños y explicar no poder tener una reunión de esa magnitud por la contingencia sanitaria del COVID-19, jóvenes y adolescentes comenzaron a salir del estacionamiento para retirarse a sus domicilios e incluso algunos padres de familia acudieron al lugar para recoger a sus hijos.
Cierran comercios por venta de alcohol irregular
El municipio de Ecatepec ha iniciado un combate contra la venta irregular de bebidas alcohólicas y durante operativos contra esta actividad, personal de la Coordinación de Mercados, Tianguis y Vía Pública desmanteló dos puestos ambulantes en los que se vendían cervezas preparadas, los cuales no contaban con las licencias pertinentes.
Un negocio, ubicado en el pueblo de Santa María Tulpetlac, dedicado a la venta de antojitos y tacos, fue cerrado por vender cervezas a sus comensales y público en general.
Mientras que a los propietarios de una de las llamadas chelerías, instalada en la vía pública de la colonia San José Xalostoc, se les advirtió que se retiraran, pues no está permitida la venta de bebidas embriagantes en las calles.