Durante la audiencia realizada en el juicio oral que se le sigue a Jorge Luis N, novio y presunto asesino de Lesvy Berlín Rivera Osorio, en el Tribunal Colegiado de la Ciudad de México, se dieron a conocer nuevos testimonios.
Entre los relatos está el Natalia N, quien compartió piso por casi dos meses con Lesvy y su novio Jorge Luis, en una casa de renta para estudiantes, recordó que Jorge Luis insultaba a Lesvy con palabras groseras como puta, pendeja e idiota, también mencionó que en varias ocasiones escuchó gritos y golpes en su habitación, insultos: ¡chingada madre! era el tipo de groserías de Jorge Luis, y el llanto de Lesvy".
Natalia señaló que la pareja realizó algunas reuniones en las áreas comunes, en donde llevaban amigos y al otro día encontraban botellas de bebidas alcohólicas vacías y fuerte olor a cigarro, por lo que fue a quejarse con la dueña de la casa porque la pareja no limpiaba el área común, además de informarle sobre los gritos y golpes, pero nunca llamó a la policía.
Sostuvo que Lesvy y Jorge Luis duraron casi dos meses en esa vivienda porque la dueña les pidió el cuarto, no obstante, ella no socializó con ellos, ya que ambos se mostraban como serios y reservados, y nos limitábamos a saludarnos cordialmente".
No luchó durante sus últimos momentos de vida
Además, al darse a conocer los resultados de los estudios realizados, se concluyó que Lesvy no realizó maniobras de defensa ni de lucha en sus últimos momentos de vida, ya que, de acuerdo con la posición del cuerpo y ropa de la occisa, el lugar de los hechos no fue alterado.
- El perito criminalista Javier García Ortiz afirmó que a Lesvy se le practicó el raspado de uñas, como marca el protocolo de feminicidios y no se encontraron datos de forcejeo y defensa en la occisa, además de que su posición original de muerte era la misma en la que fue encontrada, es decir que no se alteró la escena.
Presunto homicida, disfuncional para relacionarse en pareja
Por su parte, el psicólogo Gaspar "N" también presentó resultados de un estudio que práctico a Jorge Luis "N" en el Reclusorio Oriente, donde cumple prisión preventiva desde julio de 2017, el cual concluye que el imputado tiene un bajo control del impulso y una baja tolerancia a la frustración.
De acuerdo con este estudio, Jorge Luis tiene en sus relaciones de pareja un perfil "disfuncional destructivo", aunado a que es de las personas que ejecutan actos poco controlados y pueden cometer conductas inadecuadas, que pueden ser desde inicuas o graves, "son personas que les cuesta controlar sus impulsos".
- Dicho estudio concluye que el acusado presenta problemas de interacción por el uso excesivo de sustancias. No obstante, el consumo de drogas no puede determinar que sea un agresor.