El pasado domingo, alertaron a pobladores del ejido Pancho Villa, lugar donde mataron a los LeBarón, que habría un fuerte enfrentamiento entre integrantes de una agrupación delictiva de Ciudad Juárez, con una de Sonora, situación que finalmente ocurrió.
Un día después de que alertaron a los pobladores, se cumplió la advertencia y ocurrieron los distintos ataques, donde finalmente mataron a 9 miembros de la familia LeBarón.
La tarde del domingo 3 de noviembre, en el ejido se presentó un circo, al término de la función vespertina, supuestos jóvenes de los llamados sicarios, alertaron a la población sobre lo que sucedería; y por ello, desde el lunes la escuela, la clínica y la iglesia de la comunidad, permanecieron cerradas.
Luego de que alertaron a los pobladores, en este sitio, los niños desaparecieron de las calles, solo se observaron camionetas que cruzaron lentamente a uno y otro lado del poblado. Alrededor del mediodía, una niña pequeña se aventuró a salir a comprar a la tienda de la esquina, para después volver rápidamente a su casa.
Por este ejido, tendrán que pasar todos los asistentes al funeral de las víctimas LeBarón, que de acuerdo con autoridades, los mataron porque habrían sido confundidos como integrantes de grupos criminales.
- La localidad de Pancho Villa es la única vía de acceso viniendo de la ciudad de Chihuahua.
Un comunicado redactado en inglés, y transmitido por redes sociales, informa que el funeral de Rhonita, Howard Jr, Kristal, Titus y Tiana (Gemelos); así como, Dawna, Trevor y Rogan, fueron programados en La Mora para este jueves a las 11:00 horas.
- Estas personas que mataron, serán veladas en el patio de la casa de David y Dawna, miembros de la comunidad mormona.
Mientras los funerales fueron preparados, una caravana de familiares y amigos de la familia LeBarón, se dirigieron a este ejido rumbo a La Mora, custodiados por cuerpos de seguridad de los tres niveles de gobierno. En tanto ya iniciaron los peritajes en el municipio de Bavispe, zona donde mataron a esta familia.
En tanto, los pobladores del ejido se mantienen cautelosos, destacó una vecina que acudió a comprar refrescos a la única tienda que permanece abierta.