Aumenta el cutting entre jóvenes zacatecanos: Autoridades
Indican que la falta de comunicación entre padres e hijos orilla a estas conductas.
Mutilación y heridas provocadas, es el nuevo problema social que han detectado las autoridades entre la población juvenil en Zacatecas. La falta de comunicación familiar origina que los menores de edad tomen la determinación de causarse daño.
“El cutting más que nada es una conducta que está siendo muy recurrente en los jóvenes. Mutilarse como una forma de manifestarse y también de manejar el que ellos a partir de esa conducta se sienten vivos”, indicó el director de los centros de integración juvenil en Zacatecas, Pedro Rodríguez.
Las redes sociales han influido en el comportamiento de los jóvenes quienes observan en la práctica del flagelo y marcas corporales una forma de pertenencia grupal.
“Incluso hay algunas ligas que le dicen al jovencito como cortarse sin hacerse daño o igualmente como poder presentar o mostrar sus marcas”, remarcó Rodríguez.
Por ello, autoridades educativas hacen un llamado a los padres de familia para que intensifiquen la supervisión de lo que los menores consultan en la Internet.
Al respecto el director de la escuela primaria “Benito Juárez”, Darío Echeverría, indicó que “es necesario que estén atentos para que revisen, sobre todo con estas páginas de Internet los espacios que los padres de familia o los niños visitan”
Los tutores atribuyen a la falta de tiempo un alejamiento con sus hijos y la consecuente pérdida de comunicación. “Una solución más fácil, que los padre decimos... Ah pues ahí que vea un ratito el Internet, pero nunca vemos que es lo que está viendo”, dijo la madre de familia Alejandra Arce.
Los centros de integración juvenil atienden por éstas prácticas de flagelo a jóvenes y niños cuya edad en los últimos meses cada vez es más corta. “Es entre los 12 y los 18 años, sin embargo ya hay registro de niños de siete, ocho años que ya practican este tipo de situaciones”, comentó Pedro Rodríguez.
Los especialistas recomiendan buscar atención profesional y no reprimir ni ocultar a los jóvenes que se auto-infringen heridas.