Saramago vuelve a golpear las conciencias
Antes de morir en 2010, Saramago escribió los tres capítulos que integran su nueva novela.
José Saramago escuchó un día en Badajoz, España, la historia de una bomba lanzada por el bando franquista en la Guerra Civil que nunca llegó a explotar.
El artefacto había sido objeto de sabotaje en su fabricación y en su interior se encontró la siguiente nota, escrita en portugués: "Esta bomba no matará a nadie". El episodio conmovió al autor luso e inspiró las reflexiones que barnizan "Alabardas, alabardas, espingardas, espingardas", la novela inconclusa del difunto Premio Nobel de Literatura, disponible desde el 1 de octubre en portugués y español.
El libro, "un alegato a favor de la paz y en contra del fracaso que es la guerra", según lo define la viuda del autor y directora de la Fundación José Saramago Pilar del Río, cuenta la historia de Artur Paz Semedo, un sumiso empleado de una fábrica de armas que decide investigar el sabotaje de una bomba destinada al conflicto español. Animado por su exesposa Felicia, una mujer de fuertes convicciones pacifistas, el personaje entra en debate consigo mismo acerca de su papel como trabajador de la industria armamentística y la necesidad de concienciarse y responsabilizarse de las consecuencias de este empleo.
Saramago escribió los tres capítulos que integran la novela en los últimos meses de 2009, pero la enfermedad, una leucemia crónica, no le permitió completar su relato. Falleció el 18 de junio de 2010, a los 87 años, en su casa de la isla canaria de Lanzarote.
Sin embargo, sus palabras son suficientes para plantear una reflexión que pasa de manera inexorable por la importancia de "la responsabilidad personal", como explica Pilar del Río.
"No basta decir "no sabíamos", como tantas veces tratamos de justificarnos ante la barbarie: "no sabíamos", y así ocultamos que en el fondo somos cómplices más o menos activos con el mal. Esta novela es un hecho literario de un escritor maduro y es también la preocupación moral de un ser humano al que nada le resultaba ajeno", dijo la viuda.
Traducida y supervisada por Del Río, "Alabardas" se completa con las notas de trabajo del propio Saramago, en las que esboza cual sería el final, ilustraciones del también Premio Nobel Günter Grass y textos del escritor italiano Roberto Saviano, el autor de "Gomorra". El texto de 150 páginas (de la 9 a la 81 escritas por Saramago) en español fue publicado por el grupo editorial Alfaguara (en Portugal lo publica Porto Editorial; en Brasil Companhia das Letras).
La semana pasada, Saviano participó en la presentación de la edición en Lisboa junto al juez español Baltasar Garzón, que criticó que España es "el octavo país en fabricación de armas" y "a la vez, predica la ayuda humanitaria".