El gran proyecto de Kevin Costner, un "western" que nadie quiere hacer
A Kevin Costner no le basta su nombre y sus premios para sacar adelante proyectos en Hollywood, además tiene que invertir sus millones y aguantar las negativas de los estudios, que dudan de que los dramas que le gusta contar al actor sirvan para hacer dinero, según explicó.
Ese fue el caso de su última película "Black or White", que pasó sin pena ni gloria por taquilla tras su estreno en enero en Estados Unidos y es también la razón de que la gran producción que tiene entre manos, un "western" de 10 horas que concluye con una película, esté en dique seco.
"Podría ser una historia épica muy larga y hermosa sobre Estados Unidos", dijo Costner, un amante del género del oeste, el mismo que le valió sus dos Oscar por "Dances with Wolves" (1990) y su reciente Emmy ("Hatfields & McCoys", 2012), y que visitó en "Open Range" (2003), la futurista "The Postman" (1997), "Waytt Earp" (1994) y "Silverado" (1985).
"Está hecho y listo para empezar", afirmó el artista, que admitió que le está suponiendo una "lucha" conseguir los apoyos necesarios para que el relato pase del papel a la pantalla. "A los estudios no les convence, no creen que los mercados internacionales quieran ver 'westerns' y tienen reservas para hacer películas del oeste originales. Pueden hacer 'remakes' porque piensan que la gente ya conoce esas películas", manifestó.
Costner, de 60 años, estaría dispuesto a dirigir esta obra, un trabajo que no realiza en el cine desde "Open Range" y que le garantizaría tener control sobre el resultado final para no llevarse sorpresas.
"Cuando decido ser parte de una película no me gusta que cuando está terminada no se parezca a la película para la que yo firme. Algunas veces la mejor manera de protegerte es dirigirla", admitió el actor, que reconoció ser "muy terco" y que dice "mucho que no" cuando le ofrecen protagonizar y ponerse al frente de un filme.