Por un nuevo capítulo en el voleibol mexicano (primera parte)
Se busca ser serio contendiente al oro en Veracruz 2014.
Cuando en marzo del 2013, Jesús Perales llegó a la presidencia de la Federación Mexicana de Voleibol (FMVB) inmediatamente dio a conocer sus planes a corto, mediano y largo plazo para este deporte.Entre sus proyectos para el voleibol de sala de la categoría mayor, tuvo muy claras sus metas: que los equipos mexicanos -varonil y femenil- sean serios contendientes al oro de los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014...
... que lleguen a los Juegos Panamericanos de Toronto 2015 pensando también en subir al podio del torneo continental...
... que ambas selecciones regresen a una competencia olímpica para el 2020...
... y que los dos conjuntos consiguieran la clasificación a sus respectivos campeonatos mundiales del 2014.
En la búsqueda de estos objetivos comenzó la reestructuración del voleibol de sala. Entre otros aspectos se designaron a los entrenadores para las selecciones mayores.
Sergio Hernández fue nombrado entrenador nacional del equipo varonil y Jorge Azair, quien venía trabajando con el conjunto masculino, se convirtió en el coach de la escuadra femenil.
Así, las dos selecciones comenzaron a competir en torneos nacionales e internacionales. Pero el fogueo y la preparación de ambos representativos se basó pensando en la calificación mundialista.
En mayo pasado, el equipo varonil que también contó en su preparación con el apoyo del ex jugador y experimentado Iván Contreras, disputó en Puerto Rico el torneo clasificatorio NORCECA rumbo al Mundial de Polonia 2014.
Jugando como visitante, México logró vencer, entre otras selecciones, al equipo anfitrión para asegurar el pase al XVIII Campeonato Mundial de Voleibol Varonil, del 30 de agosto al 21 de septiembre en Polonia.
Esta clasificación se convirtió en uno de los mejores resultados internacionales de los últimos años para el voleibol varonil tricolor, ya que el pase mundialista se consiguió de manera directa, a diferencia de hace cuatro años cuando México llegó de forma indirecta al Mundial de Italia 2010, luego de haber disputado el repechaje.
La selección femenil también ha redituado lo suyo. Hace unos días viajaron a Trinidad y Tobago para disputar el repechaje clasificatorio al Mundial de Italia 2014.
Después de superar condiciones adversas fuera de la cancha, la selección azteca también triunfó en la duela al vencer, entre otros conjuntos, a las locales de Trinidad y Tobago para agenciarse el pase al XVII Campeonato Mundial de Voleibol Femenil, del 23 de septiembre al 12 de octubre en Italia.
Es así como en tan sólo año y medio de trabajo, uno de los principales objetivos de la FMVB se ha cumplido en un momento en el que los principales organismos del deporte nacional, no estaban preparados para apoyar a deportes de conjunto en su preparación, fogueo y participación en campeonatos mundiales de mayores.
Así lo corroboró Víctor de Lucio Ávila, metodólogo de voleibol de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) durante una conferencia en la que estuvieron las seleccionadas mexicanas de voleibol, así como el cuerpo técnico que acababa de regresar de Trinidad y Tobago con el pasaporte mundialista.
“La realidad es que hoy México tiene presencia en mundiales, lo que hace mucho tiempo no pasaba y eso nos llena de orgullo y de compromiso, hoy se apuesta por los deportes de conjunto, hoy se habla ya de proyectos serios para el voleibol”.
Sólo con estos resultados, las principales autoridades deportivas se vieron obligadas a voltear la mirada al voleibol tricolor que, antes de estos logros, se había mantenido sobre todo gracias al apoyo y confianza que le dieron al deporte institutos estatales como Nuevo León y Baja California.
“Teníamos que dar resultados para tener acceso a más apoyos, lo que es un hecho es que el voleibol está en pleno ascenso y nosotros complacidos de que el proyecto que se implementó hace año y medio comience a dar resultados”, enfatiza el presidente de la FMVB, Jesús Perales.
Los primeros pasos para el crecimiento del voleibol de sala se están dando. Hoy se habla de alianzas estratégicas entre la Conade, Comité Olímpico Mexicano (COM) e incluso del Instituto del Deporte de la Ciudad de México (IDDF) para dar el soporte y las herramientas que ayuden en el cumplimiento de retos y metas.
Para el entrenador nacional, Jorge Azair, es muy importante que la iniciativa privada se involucre para que el voleibol mexicano “sea autosuficiente y no dependa sólo de los organismos oficiales” y de esta manera pueda darse un crecimiento en todas las áreas.
Por lo pronto, el voleibol mexicano de sala debe cumplir el compromiso de representar al país en las justas mundialistas de este año.
Para los entrenadores Jorge Azair (femenil) y Sergio Hernández (Varonil) el reto es superar la primera ronda de los torneos mundialistas, mejorar los resultados de ediciones anteriores.
La selección varonil que intervino en el Mundial de Italia 2010 terminó en el lugar 13, mientras que el conjunto femenil que participó en el Mundial de Japón 2006 culminó en la penúltima posición (23).