Pequeño Pierroth asegura conservar incógnita
El luchador aseguró que en el festejo del 71 Aniversario de la Arena Coliseo no perderá la mascara.
Pequeño Pierroth puso el desorden el martes pasado en la Arena México. Corría el combate entre Pequeño Halcón, Astral y Acero contra Demus 3:16, Pequeño Olímpico y Mercurio cuando apareció el pequeño enmascarado agrediendo técnicos a diestra y siniestra, provocando la descalificación de los rufianes y encendiendo todos los ánimos, inmediatamente las palabras surgieron convertidas en amenazas de cara al combate en jaula del próximo domingo en la Arena Coliseo en el cual los mini-enmascarados expondrán sus incógnitas.
La sorpresa grande llegó cuando Pequeño Pierroth bajó del cuadrilátero para ir al lado del gran Norberto Salgado, Pierroth, quien estaba en las butacas presenciando el arte de Gotch y, como en los viejos tiempos encendió las pasiones.
“Pierroth, te juro por la madre mía que este domingo, en la Arena Coliseo, tu máscara y la mía no caerán y ese encuentro va dedicado a ti”, dijo el Pequeño Boricua.
Pierroth armó un verdadero maremágnum cuando su inconfundible voz volvió a increpar al público nacional vitoreando a ¡Viva Puerto Rico!; el Comandante no tuvo miramientos pues sus palabras retumbaron en la monumental Arena México; no obstante el respetable lo ovacionó recordando aquellas noches cuando desenmascaró al Supremo o al Boricua.
La mecha ya está prendida con la pólvora a unos cuantos instantes de estallar, este domingo 06 de abril en punto de las 5:00pm; las emociones subirán de tono, pues en el festejo del 71 Aniversario de la Arena Coliseo diez contendientes defenderán sus máscaras hasta las últimas consecuencias; Eléctrico, Ultimo Dragoncito, Acero, Astral, Fantasy, Stukita, Pequeño Halcón, Pequeño Nitro, Pequeño Olímpico y desde luego Pequeño Pierroth dejarán el alma dentro de la jaula que se montará en el coso de Perú 77 buscando la victoria y de paso humillar al rival.
La presencia de Pierroth inyectó motivación a su réplica a escala y al igual que en aquellas grandes noches se escuchó el grito de ¡Viva Puerto Rico indios traga nopales!