Muere Jerzy Hausleber, padre de la caminata mexicana
Hausleber fue maestro de varios marchistas en México, y antes de eso, entrenador nacional de caminata en Polonia.
Falleció a los 83 años de edad el profesor Jerzy Hausleber, conocido como "el Padre de la Caminata Mexicana", quien falleció este jueves por problemas del corazón, tras haber sido hospitalizado en agosto de 2013, luego de una caída que derivó en embolia.
El COM, lo reconoce como "un escritor de la historia de nuestro país con letras de oro", por sus conocimientos que llevaron a triunfos que registran nueve medallas olímpicas, así como 118 preseas en justas como Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe, Panamericanos, Campeonatos Mundiales y Copas del Mundo.
Jerzy Hausleber, conocido mundialmente como "Padre de la Caminata Mexicana", deja un legado de más de 40 años a la marcha tricolor y olímpica al llevar al podio a los andarines José Pedraza en 1968, Daniel Bautista 1976, Ernesto Canto 1984 y Carlos Mercenario 1992, además de forjar la carrera de Raúl González, doble medallista olímpico, así como la de un centenar de jóvenes que vieron inspiración en el Maestro.
Su legado también dio frutos en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, cuando Noé Hernández y Joel Sánchez, ganaron plata y bronce, respectivamente, llevados de la mano por Víctor Sánchez (qepd) y Pedro Aroche, pupilos del naturalizado mexicano en los años 90´s, Hausleber.
El artífice de un sistema en la caminata mexicana que encumbró a los citados marchistas y que heredó a apasionados entrenadores, nació en Vilno-Gdansk, Polonia, en agosto de 1932, pronto su nombre empezaría a brillar en su país natal cuando se convirtió en campeón nacional de este deporte, pero también de boxeo.
Pero fue a los 34 años, el 30 de mayo de 1966, cuando reclutado por el general José de Jesús Clark Flores, entonces presidente del Comité Olímpico Mexicano, decidió llamar a un grupo de siete entrenadores polacos mediante un intercambio para fortalecer al deporte nacional, especialmente a la caminata. La misión era conseguir un rendimiento óptimo en dos años... el objetivo central: los décimo novenos juegos de verano, que se efectuarían en el país en 1968.
La misión fue tomada por el polaco, quien de cero aplicó sus conocimientos en un país que a 7mil metros de altitud, en el que los deportes de resistencia mantenían no exactamente un perfil alto, sin embargo, el legado comenzó al hacerse cargo de seis deportistas, entre ellos el sargento José Pedraza Zúñiga, quien en 1966 había conseguido oro en los Juegos Centroamericanos, en 10000 metros, así como plata en los Panamericanos, en los 20 kilómetros.
Sin embargo, fue en 1968 cuando la historia de triunfos olímpicos se empezaría a escribir y sería sólo la primera presea de muchas más, así como del interés de más atletas y entrenadores para que hasta el 2014 se continúe con la tradición de la marcha. Llegado su momento, en los Juegos Olímpicos de México, Pedraza Zúñiga, entrenado por Hausleber, entrara al estadio de Ciudad Universitaria, para colgarse la presea de plata.
A este logro le siguieron los de Daniel Bautista en 1976, quien en Montreal dio la medalla de oro, en los 20 kilómetros; le siguieron Ernesto Canto, en la misma prueba, así Raúl González, doble preseísta olímpico, en los 20 y 50 kilómetro, ambos en Los Ángeles 1984. Además de Carlos Mercenario, plata en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1984 y Bernardo Segura, bronce en Atlanta 1996, en los 20 kilómetros.
Jerzy Hausleber fue condecorado en varias ocasiones no sólo en México por autoridades deportivas del país, sino reconocido por la Federación Internacional de Asociaciones de Atletismo (IAAF), máxima instancia atlética.