Miguel Herrera: "Correremos más que Brasil"
El “Piojo” analizó con FIFA.com la particular historia que une a brasileños y mexicanos.
Ya está. Miguel Herrera, junto a su Selección Mexicana, parecen haber dado vuelta a la página conflictiva de la eliminatoria mundialista que tuvo al Tri en vilo, con sucesivos cambios de entrenador y una insospechada repesca contra Nueva Zelanda.
La actualidad del combinado azteca es bien distinta a la de meses atrás, y muestra a un equipo plagado de sonrisas -como bien pudo probarse en la reciente ‘selfie’ grupal que recorrió las redes sociales- y esperanza. Sí, pese a que su excursión por el Grupo A vaya a enfrentarlo nada menos que ante Brasil, organizador y favorito a quedarse con el título.
A apenas dos semanas de ese duelo, el Piojo analizó con FIFA.com la particular historia que une a brasileños y mexicanos: el enamoramiento de 1970, la peculiar paternidad azteca en partidos decisivos y una advertencia de cara al 17 de junio: “Deberán cuidarse de nuestra entrega y determinación”.
Señor Herrera, el aficionado mexicano tiene una admiración particular por el fútbol brasileño, posiblemente gracias a la Seleção que ganó la Copa Mundial de la FIFA en 1970. ¿Qué significa para ustedes ahora jugar el torneo en Brasil?
A nosotros nos ha tocado ver ese enamoramiento de México con Brasil en Guadalajara, pero también se los apoyó mucho en 1986. En casa se les tiene un cariño especial por lo que significaron esas dos Copas del Mundo con ellos. Para nosotros representa algo excepcional estar en estas tierras, aunque difícilmente querremos hoy que nos apoyen estando en el mismo grupo. Pero sería sensacional que los dos consigamos un boleto. De seguro estarán con nosotros y nos darán su apoyo cuando pase ese segundo partido, pese a que también vendrán muchos mexicanos. Qué duda cabe, ¡los mexicanos estamos en todos lados!
México ha sido siempre un rival incómodo para Brasil e incluso le ha ganado varias finales. ¿Cómo se explica este fenómeno?
Sin dudas nos crecemos ante rivales fuertes, eso siempre lo hemos visto. México ve a Brasil y obviamente te viste, te pinta hacer un buen partido. En la última Copa Confederaciones perdimos 2-0 pero el segundo gol llegó sobre la hora. Hicimos un buen juego, e incluso tuvimos oportunidades de empatar. En los Juegos Olímpicos (2012) ganó México, en la Sub-17 gana México. Generalmente le hacemos buen fútbol a Brasil. Tenemos que ser conscientes de que vamos a jugar contra el país sede, el más fuerte porque así lo dice la historia, pero tenemos que salir a matarnos. Ganarle a Brasil en Brasil nos va a vestir y nos va a poner en todo lo alto. Esa es la mentalidad que tenemos que tener.
¿De qué tendrá que cuidarse Brasil cuando se vea la cara con México?
De nuestra entrega y determinación. Vamos a ir a todas las pelotas divididas buscando que sean nuestras. Seguramente vamos a correr mucho más que ellos, porque si queremos ganar tendremos que correr. Es un equipo que sabe con la pelota, con jugadores que desequilibran fácilmente y que se pueden llevar a uno o dos jugadores: Neymar, Hulk, podría nombrar cuatro, cinco o seis futbolistas capaces de desnivelar. Pero si hacemos el dos contra uno en la mayoría de los sectores de la cancha, o los recorridos los hacemos cortos, creo que estaremos muy sólidos para tratar de ganarles.
Si tuviera que elegir un partido entre Brasil y México que recuerde particularmente, ¿cuál sería?
Todos los partidos que hemos jugado con ellos, que me tocó disputar o ver, han sido buenos para México. La misma Copa Confederaciones que se le gana a Brasil en México, o la Copa de Oro a la que fueron invitados (2003). A mí me tocó incluso venir a jugar a Maceió un amistoso y empatamos 1-1. Podemos hacerle buen fútbol a los fuertes.
¿Es Neymar el jugador a vigilar el próximo 17 de junio en Fortaleza?
Obvio, me parece el jugador más talentoso de Brasil. Es la figura emblemática de este equipo y hoy de este Mundial, por ser su casa. Aquí lo adoran. Tendremos que estar muy atentos para poder parar a un jugador de esa calidad.
¿Cómo se lo para?
Tratando de que no llegue la pelota a él. Eso es lo mejor. Ya con la pelota él es un tipo que te marca diferencia: puede gambetear a uno, a dos o hasta tres jugadores con la habilidad que tiene. Hay que tratar de cortar esa conexión, evitar que le llegue la pelota será importante.
¿Puede sacarse alguna conclusión del trabajo táctico que se hizo en la final del Torneo Olímpico de Fútbol 2012 en Londres? Ese día funcionó a la perfección para México.
Totalmente, vamos a buscar ese corte que hizo ese día. Neymar no tuvo mucha conexión con la pelota y por eso México triunfó en ese partido. Haremos algo muy parecido. Aquí hay jugadores de más calidad por tratarse de una selección mayor, y sin dudas estaremos muy atentos a la conexión entre el equipo, Neymar y viceversa.