Más de 500 atletas competirán en Paralímpicos de Sochi
Estados Unidos, Alemania y Reino Unido no enviarán a los Juegos a delegaciones oficiales pero sí a sus deportistas, como protesta por la intervención rusa en la península ucraniana de Crimea.
Más de 500 deportistas participarán a partir del viernes en los Juegos Paralímpicos de Invierno de Sochi, que se inaugurarán pendientes de la crisis política entre Rusia y Ucrania.
El Comité Olímpico Ucraniano se reserva hasta el último momento el anuncio de un posible boicot a los Juegos, en función de cómo evolucionen las gestiones diplomáticas.
Hasta el momento, el equipo ucraniano figura como uno de los 45 inscritos (30 de ellos europeos, ninguno africano) y, además, uno de los más numerosos y con más opciones de medalla.
Brasil, Turquía y Uzbekistán son los tres países que en Sochi se estrenarán en unos Juegos Paralímpicos.
Junto a Brasil, completarán la participación iberoamericana Argentina, Chile y México.
En las pistas de hielo de Adler y en las montañas de Krásnaya Poliana se pondrán en juego 72 podios en las disciplinas de esquí alpino, biatlón, esquí de fondo, hockey sobre hielo, curling en silla de ruedas y la debutante snowboard.
El viernes se celebrará la apertura de los Juegos, y concluirán el domingo 16. En la gran fiesta inaugural tendrá un especial protagonismo el fuego paralímpico, después de que ayer las llamas llegadas de 45 ciudades rusas y de la localidad inglesa de Stoke Mandeville, donde nacieron los Juegos, se unieran en una emotiva ceremonia, de gran simbolismo dada la situación política en la zona.
Aunque Alemania ganó los Juegos Paralímpicos de Vancouver 2010, a nadie le extrañaría ahora una victoria en el medallero del equipo ruso, tal y como sucedió en los Olímpicos que concluyeron hace dos semanas en el balneario del Mar Negro.
El presidente del Comité Paralímpico Internacional (IPC), el británico Philip Craven, mostró su deseo de que, además de un éxito organizativo y deportivo, los Juegos consigan su fin último, ayudar a que se eliminen las barreras en la vida diaria de los discapacitados rusos.