Libertad al jefe de la F1
Un Tribunal de Múnich dio su sentencia a favor del empresario británico.
El jefe de Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, consiguió dejar hoy el Tribunal de Múnich como un hombre libre, sin antecedentes penales y con una gran sonrisa después de que los jueces autorizaron el pago de una multa por cien millones de dólares.
El juicio contra Ecclestone duró tres años y hoy se puso punto final a ese proceso judicial, en el que el jefe de Fórmula Uno fue acusado de soborno e instigación al fraude por parte de un funcionario público del Banco alemán BayernLB.
El trato entre la Fiscalía y el abogado de Ecclestone se dio a conocer este martes pero los jueces que encabezaron el juicio tenían que dar su autorización y para ello se reunieron para deliberar en Munich. Después dieron a conocer que estaban de acuerdo.
Medios alemanes publicaron en sus ediciones en línea de este martes que Ecclestone compró su libertad por 100 millones de dólares. Los jueces y la Fiscalía lo rechazaron y señalaron que hasta ahora no se reunieron pruebas sólidas para sentenciarlo.
La Fiscalía agregó que a favor de Ecclestone juegan un papel su avanzada edad de 83 años así como una serie de atenuantes que se constataron durante el juicio.
La ley alemana contempla que un proceso se puede conmutar en el caso de delitos pequeños y medianos, si no se puede probar que el acusado es autor de un delito, y es asimismo permitido que se fije una multa financiera.
Desde el principio del juicio fue muy difícil constatar las acusaciones que hizo en su contra el exejecutivo del banco del estado bávaro, a su vez acusado de malversaciones, Gerhard Gribkovsky.
El funcionario público dijo que recibió 44 millones de Ecclestone para inducirlo a que consiguiera imponer en el banco la venta de un gran paquete de acciones de Fórmula Uno al inversionista que prefería Ecclestone.
Gribkovsky ya fue sentenciado por el mismo Tribunal a una pena de cárcel de ocho años y medio.