La influencia del Mundial de 1930 (Especial)
Es a raíz de esta Copa Mundial que se comienza a profesionalizar el futbol en América Latina.
El primer Mundial de futbol se llevó a cabo en 1930 y se jugó en Uruguay. La elección de este país, mucho se debe a que fue bicampeón de los Juegos Olímpicos de Francia 1924 y Amsterdam 1928. Al final Uruguay demostraría al mundo que el mejor futbol del mundo nacía en territorio “Charrúa”.
En el 1930 el mundo veía por primera vez a Mickey Mouse en comics, Plutón era visto por primera vez por el astrónomo estadounidense Clyde W. Tombaugh, Mahatma Gandhi le enseñaría al mundo como se hace una revolución pacífica mientras los ingleses lo arrestaban; Constantinopla era rebautizada como Estambul y el 13 de julio, México recibiría el primer gol de una Copa del Mundo frente a Francia, obra de Lucien Laurent.
Una docena de países pasaron a la historia al llegar a Montevideo para ser parte de esta justa deportiva. Por Europa: Francia, Bélgica, Yugoslavia y Rumania. Por América: Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Estados Unidos, México, Paraguay, Perú y el local Uruguay.
En los festejos de inicio del Mundial se celebraron también los cien años de la Constitución uruguaya, misma que dejó fuera de todos los derechos civiles a mujeres, pobres y analfabetas y que a su vez le dio nombre al estadio más representativo de Uruguay, el Estadio Centenario.
Al final del torneo, Uruguay levantó el trofeo Jules Rimet y le daba motivos a clubes europeos para fijarse en el futbol de América ya que jugadores como José Nasazzi, capitán de Uruguay en el 24, 28 y 30; el delantero Pedro "Perucho" Petrone, que con un disparo era capaz de desmayar a un portero o romper la red, o el que fuera el mejor goleador de los “charrúas” en el Mundial de casa, José Pedro Cea que con cinco goles quedó como segundo mejor goleador, por debajo del argentino Guillermo Stábile que metió 8, asombraron a propios y extraños.
Curiosamente el primer en emigrar al viejo continente fue “Perucho” Petrone que sólo vio participación en un duelo del Mundial y no metió un solo gol, pero era famoso por su potente disparó.
La Florentina de Italia se hizo con sus servicios y en 1931 debutó como profesional, metiendo 11 goles en una tarde, al final del torneo fue campeón goleador de Italia con 37 dianas en 44 partidos y aunque el club italiano le ofrecía lo que él pidiera por quedarse, Petrone decidió volver al Nacional porque no compartía las ideas políticas que vivía en ese entonces Italia.
Este fue el parte aguas para que muchos jugadores de América Latina buscaran ir a Italia a jugar. Comenzaron a amenazar a sus clubes con emigrar y dejar al equipo, por lo que algunas ligas decidieron dar el paso hacia el profesionalismo.
La primera liga de América en ser creada fue la Argentina que ante la constante salida de jugadores, en 1931 profesionalizó su futbol, a este ejemplo le siguieron otros, Brasil en 1934 creó el contrato vitalicio que ligaba a un jugador de por vida a menos de que la institución lo dejara salir a jugar con otro club.
Es aquí que empieza la etapa donde el jugador entrega su habilidad, pasión y talento a cambio de un salario, pero a diferencia de nuestros tiempos, se les exigía menos, los entrenamientos eran de dos horas a la semana y en algunos clubes se les cobraban algunos pesos si faltaban a la práctica y no presentaban justificante médico.