Escándalo en puerta para Grandes Ligas
El F.B.I. y los fiscales del Departamento de Justicia están investigando a los funcionarios de la oficina central de los Cardenales de St.Louis, uno de los equipos más exitosos en el beisbol en las últimas dos décadas, por hackear las redes internas de un equipo rival para robar información muy bien guardado sobre jugadores de cara al Draft de las Grandes Ligas (MLB).
Los investigadores han descubierto evidencia de que los funcionarios de los Cardenales irrumpieron en una red de los Astros de Houston que albergaba bases de datos especiales que el equipo había construido, según los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley. Las discusiones internas sobre las operaciones, las estadísticas de propiedad y los informes de exploración fueron comprometidos, dijeron los funcionarios.
Los funcionarios no dijeron si los empleados fueron el foco de la investigación o si los funcionarios de más alto rango del equipo eran conscientes de la “piratería” y dieron autorización a ella. La investigación está siendo dirigida por la oficina de campo del FBI en Houston y ha progresado hasta el punto de que las citaciones se han realizado a los Cardenales.
El ataque representa el primer caso conocido de espionaje corporativo en el que un equipo deportivo profesional ha hackeado la red de otro equipo.