La cultura del esfuerzo siempre ha estado presente en nuestras vidas, en Unotv.com te presentamos hace unas semanas dos ejemplos de superpapás que no sólo conmovieron nuestros corazones, sino que nos hicieron reflexionar. El primero, un vendedor de elotes, el segundo, un bolero; ambos con su trabajo impulsaron que sus hijos se convirtieran en profesionistas. Y no podemos dejar de mencionar a las nenis, mujeres emprendedoras que con su esfuerzo y habilidad llevan dinero a sus hogares o las madres solteras y famosas que sacaron adelante a sus hijos.
Por ello, te hablaremos de la cultura del esfuerzo, en qué consiste y te daremos algunos tips de expertos de expertos para adentrar a tus hijos en esta práctica.
¿En qué consiste la cultura del esfuerzo?
“Es el conocimiento de que las cosas se ganan o las metas se consiguen a través del trabajo o esfuerzo”, indica en entrevista Mariana Chávez Rodríguez, maestra en Educación basada en Competencias y en Psicoterapia Psicoanalítica.
La cultura del esfuerzo es uno de los mejores legados que las madres y padres pueden dejar a un hijo, pues así lo impulsan a poner en marcha diversos valores, mecanismos y herramientas que le ayudarán a desarrollarse como ser humano, señala la experta quien nos da 8 tips.
8 Tips para inculcar a tus hijos la cultura del esfuerzo
- Establece límites. No le des todo lo que quieren a la primera
- Permite que se aburran. El aburrimiento los llevará a buscar soluciones, movilizar su imaginación, su deseo
- Otórgales responsabilidades de acuerdo con su edad
- Diseñen un plan de trabajo y esfuerzo. Si desea algo, organicen un plan para que trabajen por ello
- Celebra sus logros y señala sus áreas de oportunidad. Explícale cómo su esfuerzo rindió frutos, incluso si no cumplió su meta, pero adquirió herramientas para el futuro
- Platica de casos exitosos. Las familias mexicanas están llenas de ejemplos vinculados a la cultura del esfuerzo
- Permite que viva las consecuencias de su falta de esfuerzo
- Enséñale a agradecer. Hazlo consciente de que todas las cosas que tiene también se deben al esfuerzo de otros
La cultura del esfuerzo en las jóvenes generaciones
A diferencia de las generaciones anteriores, que se tuvieron que esforzar mucho para conseguir lo que tienen o crecieron empapadas en la cultura del esfuerzo, las nuevas generaciones de jóvenes están plagadas de un discurso antiesfuerzo, explica el psicoanalista Rodrigo Asseo.
Sin embargo, las nuevas generaciones fueron educadas por padres y madres que debieron esforzarse mucho para conseguir lo que tienen y que creyeron que una buena “maternidad-paternidad” radicaría en ahorrarle a sus hijos el sufrimiento y el trabajo que ellos tuvieron para salir adelante.
Esto trajo como resultado “hijos mimados a los que les cuesta mucho trabajo encontrarse con su deseo y ponerlo en marcha en el mundo productivo, hijos que todo lo quieren rápido, siempre buscando ayudas de los demás, pues jamás se han tenido que valer por sí mismos”, señala el psicoanalista Asseo.
El peor escenario es cuando el niño pierde el “deseo”, el motor de la vida y elimina el placer y la seguridad que le otorga el “lograr las cosas por sí mismo.
Maestra Mariana Chávez Rodríguez
Te puede interesar. ¿Qué tan padre eres? Checa 5 tipos de papás y ve cuál te define
¿La mentira de esta filosofía?
Algunos expertos en educación no están muy convencidos de la cultura del esfuerzo y no dudan en criticarla porque, en determinados contextos, pese al esfuerzo los objetivos no se alcanzan.
Al respecto, el psicoanalista Rodrigo Asseo previene: “Como ustedes han de imaginar, la cosa no es tan simple como esforzarse y ya para tener un supuesto éxito y conseguir subir en la escala competitiva laboral”
Sin embargo, se debe señalar que el éxito sin esfuerzo no existe, dice el experto, también para no caer en la cultura del antiesfuerzo, señala el especialista.
“El esfuerzo es un motor necesario para conseguir un lugar competitivo”
Rodrigo Asseo, psicoanalista
El psicoanalista Asseo recomienda “hacerse cargo como padres de lo que vivimos en la infancia y nos marcó es un punto crucial para la educación de las siguientes generaciones”.
TE PODRÍA INTERESAR.
¡No grites! Así debes manejar los berrinches de un niño pequeño
