El grupo farmacéutico estadounidense Pfizer calcula que las ventas de su vacuna contra el COVID-19 alcanzarán unos ingresos de 15 mil millones de dólares en todo el 2021, una suma enorme que podría aumentar si el laboratorio firma nuevos contratos de entrega.
Si se confirman sus previsiones, esa vacuna sería una de las más rentables de la historia de la industria farmacéutica. Pfizer, que desveló este martes sus resultados trimestrales, espera obtener con ese producto unos beneficios antes de impuestos de entre el 25 y el 30%.
En el cuarto trimestre de 2020, la compañía vendió vacunas por 154 millones de dólares, tras el visto bueno de las autoridades sanitarias en varios países a finales de 2020.
Pfizer, que dio el mes pasado una primera estimación de su beneficio por acción ajustado, lo revisó al alza tras nuevos cálculos sobre sus ingresos potenciales con la vacuna.
Ahora espera obtener un beneficio por acción ajustado de entre 3.10 y 3.20 dólares, frente a la horquilla de entre 3 y 3.10 dólares que anunció en enero.
Ese beneficio es el indicador vigilado por los círculos financieros para medir la rentabilidad de una empresa, ya que no toma en cuenta elementos externos como los impuestos y algunos costes.
Pfizer prevé un aumento del 47% respecto al 2020
Pfizer prevé un volumen de negocios total en 2021 de entre 59.400 millones y 61.400 millones de dólares, lo que supondría un aumento de entre el 42 y el 47% respecto a 2020.
Según la compañía, esas previsiones se basan en la hipótesis de un “repunte continuo de la actividad macroeconómica y de la salud a lo largo de 2021, a medida que las poblaciones reciban vacunas contra el COVID-19“.
En el cuarto trimestre de 2020, el volumen de negocios de Pfizer aumentó un 12% hasta 11.700 millones de dólares. El alza fue fruto, sobre todo, de las ventas de tratamientos contra varios tipos de cáncer (+23%) y del conjunto de las vacunas del grupo (+17%).