El fabricante de juguetes, Lego, anunció que invertirá 400 millones de dólares durante los próximos tres años para intensificar los esfuerzos de producir sus coloridos bloques de construcción usando materiales sostenibles en lugar de plástico a base de aceite.
La inversión ayudará a Lego a alcanzar su objetivo de convertirse en carbono neutral para 2022 en términos de producción, así como a eliminar gradualmente el plástico de un solo uso en los envases para 2025 y reemplazar los ladrillos de plástico por otros fabricados con materiales sostenibles al final de la década.
La búsqueda de Lego de una alternativa adecuada al plástico a base de aceite ha resultado difícil. Durante los últimos cinco años, un equipo de más de 150 ingenieros y científicos ha estado probando diversos materiales reciclados y de origen vegetal.
“La dificultad es llegar a un punto en el que los ladrillos tengan el mismo color, el mismo brillo, el mismo sonido”.
Tim Brooks, vicepresidente de responsabilidad medioambiental de Lego.
Materiales más sostenibles para Lego
En 2015, Lego anunció una inversión de 150 millones de dólares para el uso de materiales sostenibles en sus productos. La mayor parte de la nueva inversión de 400 millones de dólares se destinará a encontrar materiales más sostenibles para productos y empaques y en implementar los cambios, dijo la compañía.
Lego utiliza unas 90 mil toneladas de plástico en sus productos cada año, pero desde 2018 ha fabricado algunas de las partes menos rígidas de los sets, como plantas y árboles, a partir de biopolietileno, un tipo de plástico hecho de etanol, producido con caña de azúcar.
“Los ladrillos deben fabricarse con la precisión del ancho de un cabello. Algunos los tuvimos que desarmar con alicates y llave inglesa”, dijo Brooks, refiriéndose a los bloques de biopolietileno.
De acuerdo con Tim Brocks, el material no funciona tan bien para los bloques duros estándar que todavía están hechos de plástico a base de aceite, y Lego está probando cómo usar biopolietileno para esos ladrillos.