El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer que la inflación anual en México se ubicó en 7.05% en la primera quincena de noviembre, lo que refuerza expectativas de que el Banco de México (Banxico) subiría por quinta ocasión consecutiva su tasa de interés referencial el próximo mes.
Este incremento comenta Luis Miguel González, director editorial del periódico El Financiero, tiene una razón para preocuparse, pues es la mayor en 20 años.
El tema (de la inflación) preocupó mucho tiempo antes a las amas de casa, a las personas de clase media a empresarios, porque simplemente tenemos un rato en donde algunos precios relevantes se están saliendo de control. Estamos hablando de algunos insumos domésticos, pero también estamos hablando de precios de referencia industrial como el acero. Es preocupante porque estamos en niveles máximos, pero sobre todo porque el final de este brote inflacionario no está a la vista.
Luis Miguel González, director editorial del periódico El Financiero
La inflación afecta a la canasta básica
A decir de Luis Miguel González, esto sí pega directamente en el bolsillo porque estamos hablando de productos de la canasta básica, pero también, explica, a bienes o insumos muy importantes para la industria como el acero, el gas, la gasolina, la electricidad. Esta combinación genera, por un lado, la fotografía del 7.05%, pero sobre todo pone en marcha una cosa en la que los economistas le tienen mucho miedo y es la expectativa.
¿Qué significa la expectativa para los empresarios?
Para muchas familias, para muchas empresas, el tener estos niveles de inflación los hace temer que en el futuro próximo va a haber más inflación y a partir de eso toman decisiones, por ejemplo, de restringir consumo o en algunos casos, de subir precios.
- Ejemplos:
Las personas que acuden a un servicio como la peluquería encuentran un incremento y la razón te dicen: es por la inflación.
Las personas que rentan una casa o un departamento toma a partir de los precios, la expectativa de que la inflación va a seguir y que pues para el año que entra subirá el costo del inmueble.
Estas expectativas hacen que la inflación genere una especie de movimiento autosostenido. Eso es lo que preocupa a los banqueros, preocupa a los economistas, pero sobre todo, es lo que está viviendo la gente en sus casas o en sus pequeños negocios. Vamos a ver un clima donde por primera vez en mucho tiempo volvemos a hablar de inflación y de incremento de precios.
Luis Miguel González, director editorial del periódico El Financiero
Hay exceso de liquidez y esto obligará eventualmente al Banco de México a aumentar las tasas de interés para controlar justamente este fenómeno, pero cuando una parte de la inflación es importada, porque el precio de los energéticos en el mundo está caro, el precio del trigo, del maíz, del sorgo en el mundo está caro. Los efectos de un alza de tasas son limitados.
No quiere decir que no se deba o que no se pueda hacer. Lo que sí creo es que hay que estar conscientes que aun subiendo las tasas de interés en el Banco Central, la inflación para usar la expresión seguirá vivita y coleando.
Luis Miguel González, director editorial del periódico El Financiero
Luis Miguel González comparte la declaración de un sub gobernador del Banco de México que este fenómeno va a persistir por lo menos la mitad del año entrante, aunque algunos efectos de la inflación van a quedarse y van a dejar su huella.
Afirma que hay un esfuerzo por subir el salario mínimo, pero no todos los salarios se están moviendo al mismo ritmo que el salario mínimo; algunos simplemente no alcanzan a la inflación.
