Cada vez están más cerca las elecciones presidenciales en Estados Unidos, uno de los comicios más caros del mundo.
En esta ocasión se enfrentan el actual mandatario Donald Trump, quien busca la reelección, y el candidato demócrata Joe Biden.
Pero, ¿quién aporta el dinero a las campañas de los candidatos? Una parte es con pequeñas contribuciones de 10 o 20 dólares que realizan los habitantes de dicho país y otra porción es por cientos de multimillonarios que entregan grandes cantidades.
La Comisión Electoral Federal (FEC, por sus siglas en inglés), la organización gubernamental que supervisa las elecciones en Estados Unidos, asegura que hasta el 22 de septiembre, las contribuciones totales a las campañas presidenciales durante el ciclo electoral de 2020 llegan a la cifra récord de 3 mil 155 millones.
De esta suma, mil 72 millones de dólares son donaciones individuales de menos de 200. Dichas donaciones directas están muy limitadas por las reglas electorales que imponen estrictos topes monetarios y muchos requerimientos de transparencia a la hora de reportarlos.
Comités de Acción Política, un camino distinto para el dinero de las campañas
Otro camino por el cual llega el dinero a los candidatos son los Comités de Acción Política (PAC, o Super-PAC por sus siglas en inglés), un tipo de organizaciones de recaudo de fondos para causas políticas, que en principio deben guardar cierta independencia frente a las campañas electorales de los candidatos individuales.
Esta organización, el Super-PAC, no puede trabajar directamente y totalmente con el candidato, pero puede defender ideas conservadoras y pagar por comerciales de televisión con ideas afines a las suyas.
Los Super-PAC, por estar sujetos a menos reglas, son las que canalizan parte importante de los recursos de los magnates a las causas políticas de su preferencia.
Según datos de la Comisión Electoral Federal, en este proceso electoral los Comités de Acción Política ya han recaudado 1.418 millones de dólares.