Cuando se habla de productos financieros, entre sus características es común escuchar sobre interés y rendimiento, que aunque a primera vista lo parecen, no son lo mismo. Por eso, esta vez en Unotv.com te decimos cuáles son sus diferencias.
De entrada, hay que partir de su punto en común, y razón también por la que interés y rendimientos llegan a considerarse sinónimos, pues ambos son ese costo o cantidad adicional que genera un instrumento financiero, llámese crédito o inversión.
¿Cuál es la diferencia entre interés y rendimiento?
Dicho esto, en realidad la gran diferencia de ambos conceptos es la perspectiva desde el punto de vista de quién pone el dinero inicialmente, pues ambos tienen los mismos actores.
Y es que interés aplica en el caso de un crédito, sin importar si es personal, automotriz, hipotecario o por una tarjeta de crédito, pues tú como cliente debes pagar una cantidad extra por ese dinero que el banco o la financiera te prestó.
Por ello, es común escuchar que por un crédito de 50 mil pesos tendrás que pagar unos 15 mil pesos adicionales al final de tu crédito con una tasa de interés del 30%, con lo que terminarás desembolsando 65 mil pesos.
Mientras que el rendimiento es lo contrario, pues algunos bancos lo definen como ese monto adicional que tú como cliente recibes por una inversión y que el banco, tu financiera o un tercero deben pagarte. En otras palabras, en este caso tú pusiste inicialmente el dinero que otra entidad terminó recibiendo en préstamo.
En este sentido, la plataforma Cetes Directo de Nacional Financiera destaca que por cada Certificado de la Tesorería de la Federación (Cete), al plazo de 28 días, al elegir este instrumento, como ahorrador, recibirás el 11.0% de rendimientos. Es decir, por cada cete que compres, a un precio de 9.91 pesos al 22 de septiembre de 2023, recibirás 11 pesos a los 28 días.
Los rendimientos llegan al final
Además, otra diferencia entre ambos conceptos es que en la práctica los rendimientos llegan al final, cuando ya concluyó el plazo de la inversión, al momento de liquidarla si retiras antes tu dinero o al vender tus títulos, como en el caso de las acciones, donde podrías tener rendimientos si su valor de venta es mayor que cuando las compraste.
Al contrario, es común que los intereses de un préstamo los vayas pagando a la par de éste o incluso al inicio, según el contrato con tu prestador, pues regularmente del total de mensualidades en que se difiere el crédito, las primeras serán pagar intereses, para después ir pagando porcentajes de la deuda.
Sin embargo, mientras en México las instituciones financieras manejan estos conceptos por separado, es común que se emplee únicamente el término “interés”, como lo hace el Banco Central Europeo (BCE), por dirigirse en su mayoría a las instituciones, que consideran estos adicionales como intereses, ya sea cargo de ellos o del cliente.