El 3 de julio de 2023 se conmemoran 68 años del voto de la mujer en México. Su derecho democrático a participar en la toma de decisiones en nuestro país no hubiera sido posible, sin la lucha histórica que promovieron mujeres valientes y políticos conscientes para lograr que hoy en día, tengamos una sociedad más equitativa. Esta es la historia de lucha y los personajes que lo hicieron posible.
¿Cuándo votaron las mujeres por primera vez en México?
Fue el 3 de julio de 1955, cuando las mujeres en México sufragaron por primera vez en una elección federal. En esa ocasión se elegía a diputados federales para la XLIII Legislatura.
Inicios del voto femenino en México
El 13 de julio de 1923, el gobernador de San Luis Potosí, Aurelio Manrique, expidió un decreto en el que se concedía a las mujeres potosinas el derecho a votar y a ser elegidas en elecciones municipales. Para lograrlo a nivel nacional, llevó más años.
El derecho al voto de la mujer en todo México comenzó el 12 de febrero de 1947, con la publicación en el Diario Oficial de la Federación de una adición al artículo 115 para que pudieran votar y ser elegidas candidatas a un puesto de representación popular.
Para el 17 de octubre de 1953, una vez superado el trámite legislativo, Adolfo Ruiz Cortines promulgó las reformas constitucionales para que las mexicanas gozaran de este derecho. A pesar de este gran avance, el sufragio femenino tardó más años en consolidarse.
¿Quién fue Hermila Galindo, promotora del voto femenino en México?
La secretaria particular de Venustiano Carranza, Hermila Galindo, defendió el derecho de las mujeres a no sólo desarrollarse en el hogar y el cuidado de los hijos. Consideraba que si ellas pagaban contribuciones, obedecían a las autoridades y purgaban las mismas penas que los hombres en las cárceles, era ilógico que no se les dejara votar.
Galindo fue la primera promotora del voto femenino en México. Sus ideales en defensa de los derechos de la mujer, la llevaron a enviar una iniciativa al Congreso Constituyente, reunido en la ciudad de Querétaro, en la que planteaba la necesidad de otorgar el derecho de las mujeres a votar como un paso importante para incluirlas en la vida política.
La iniciativa fue leída el 12 de diciembre de 1916 y rechazada por los Constituyentes. En 1917, desafió la ley electoral vigente. Hermila Galindo se presentó como candidata a diputada federal por el V Distrito Electoral de la Ciudad de México.
Aunque no ganó la elección, sentó un precedente importante en la lucha por los derechos políticos de las mujeres. Además de defender y difundir las tesis del Carrancismo, Galindo se convirtió en la máxima exponente del feminismo en México entre 1915 y 1919.
¿Cómo se logró el reconocimiento del voto de las mujeres en México?
En 1923, en México se celebró el Primer Congreso de la Liga Panamericana de Mujeres, donde asistieron más de 100 delegadas, entre ellas las dirigentes feministas Luz Vera, Margarita Robles de Mendoza, Matilde Montoya, Columba Rivera y Julia Nava de Ruíz Sánchez.
Este encuentro resolvió enviar al Congreso de la Unión una petición de igualdad de derechos políticos para hombres y mujeres. Para fines de aquella década, el tema del sufragio femenino pasó a formar parte de la agenda de los partidos políticos.
En 1937, durante el gobierno de Lázaro Cárdenas, se lanzó la iniciativa de reforma al artículo 34 de la Constitución para solicitar por primera vez el derecho a la mujer de votar y obtener cargos de elección popular. Aunque dicha iniciativa fue aprobada por el Legislativo, no se hizo la declaratoria y quedó en el aire.
Para el 6 de abril de 1952, más de 20 mil mujeres se agruparon en el Parque 18 de Marzo de la Ciudad de México, exigiendo al entonces candidato presidencial Adolfo Ruíz Cortines que hiciera cumplir su gran promesa de plasmar en la Constitución el derecho de las mexicanas a votar y ser electas.
México fue de los últimos seis países en legislar el voto de las mujeres y gran parte se debió a la presión internacional de la ONU, que en 1952 estableció que ningún país podía decirse democrático, si más de la mitad de su población no tenía la ciudadanía.
¿Quién fue la primera gobernadora en la historia de México?
No fue sino hasta 1979 cuando México tuvo a su primera gobernadora: Griselda Álvarez de León, en el estado de Colima. Pertenecía a una familia de gran trayectoria política. Su bisabuelo, el general Manuel Álvarez, fue el primer gobernador de Colima en 1857, cuando la entidad alcanzó la categoría de estado. Su padre Miguel Álvarez García también ocupó la gubernatura entre 1919 y 1923.
El día de las elecciones los habitantes de Colima demostraron que estaban listos para el cambio otorgando a Griselda Álvarez una ventaja de más de 50 mil votos frente a su principal competidor, el candidato Gabriel Salgado Aguilar.
Fue una feminista militante hasta su muerte, ocurrida el 26 de marzo de 2009 en la Ciudad de México. Creó el Centro de Atención a la Mujer, A. C., fundó la Alianza de Mujeres de México y la Asociación Mexicana de Bienestar Social, además de ser presidenta honoraria vitalicia de la Federación de Mujeres Universitarias.
¿Qué es el principio de paridad de género?
La paridad de género es un principio constitucional que se refiere a la participación equilibrada, justa, y legal, que asegura que al igual que los hombres, las mujeres en toda su diversidad tengan una participación y representación igualitaria en la vida democrática de nuestro país.
El derecho a las mujeres al voto ha contribuido a la consolidación de la democracia. La reforma político-electoral del 31 de enero de 2014, elevó a rango constitucional la garantía de la paridad entre mujeres y hombres en las candidaturas a la Cámara de Diputados, Senado y Congresos Estatales.
En julio de 2018, las Cámaras de Diputados y Senadores tendrían por primera vez paridad de género en su conformación. La Cámara de Diputados se conformó con 246 mujeres (el 49.2% de las curules) y 254 hombres (el 50.8%).
La paridad de género empieza a materializarse en las elecciones federales de 2021, donde se empezó a ver una diferencia de paridad menor al 1% entre hombres y mujeres, para los poderes Legislativo y Ejecutivo, tanto a nivel federal como en las entidades y en el Judicial está sucediendo algo parecido.
El voto de las mujeres en México significó el reconocimiento a la igualdad en la participación política. A partir de entonces ha continuado la lucha por sus derechos a participar en la toma de decisiones del país. En la actualidad, la presencia de la mujer en cargos de elección popular es una realidad.