En 2011, México fue testigo de uno de los casos de crueldad y abuso más impactantes, luego de la denuncia contra Jorge Antonio Iniestra Salas, quien, entre sus atrocidades, mantuvo cautivas y abusó sexualmente, por muchos años, de sus hijastras.
Aquí en Unotv.com te contamos la historia, así como los aspectos más importantes sobre este sujeto, quien fue llamado el “Monstruo de Iztapalapa”, por sus graves y escalofriantes actos.
¿Cuál es la historia de Jorge Antonio Iniestra, el “Monstruo de Iztapalapa”?
En 2004, una mujer, cuyo nombre era Clara Tapia Herrera, quien trabajaba en una mueblería, conoció a Jorge Antonio Iniestra Salas, con quien sostuvo una relación sentimental.
Años después, la pareja tomó la decisión de vivir junta, por lo que se mudaron a la escuela primaria Manuel C. Tello, ubicada en la alcaldía Iztapalapa, en la Ciudad de México; en el lugar vivía la mujer, quien era la conserje.
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Sin embargo, Clara Tapia Herrera no estaba sola, pues tenía tres hijos: Gabriela, Rebeca y Ricardo, quienes nunca imaginaron lo que estaba por suceder.
¿Qué hizo y por qué lo llamaron el “Monstruo de Iztapalapa”?
En 2005, la mujer, quien era originaria de Puebla, descubrió que, al interior de una habitación, su hija Rebeca, quien en ese momento tenía 12 años de edad, era abusada por Jorge Antonio Iniestra.
Este acto fue sólo uno de los tantos que cometió el sujeto, quien mantuvo en cautiverio a las dos niñas, mismas a las que no dejaba tener contacto con el exterior. Además de golpear y maltratar a Clara Tapia, el “Monstruo de Iztapalapa” obligaba a Ricardo, su hijastro, a observar mientras mantenía relaciones sexuales con su madre y sus hermanas.
“La señora Clara Tapia lo permitía, para la señora era una fantasía ver a sus hijas en posiciones sexuales eróticas”, expresó Jorge Antonio Iniestra en una entrevista.
Por otro lado, no sólo cometía abusos contra ellas, sino también contra Ricardo, a quien obligaba a trabajar en la calle, recolectando cartón y vendiendo chicles. El menor, quien era golpeado y amarrado desnudo por el “Monstruo de Iztapalapa”, en caso de no cumplir con la cuota establecida, vivía dentro de un tinaco.
Jorge Antonio Iniestra tuvo 5 hijos con sus hijastras
El sujeto, quien mantenía cautivas a Rebeca y Gabriela, abusaba sexualmente de ellas, incluso frente a su madre y hermano; producto de estos actos, las menores tuvieron cinco bebés.
Años después, ante las sospechas, la familia cambió de residencia, yéndose a vivir a casa de la mamá de Jorge Antonio Iniestra, lugar en que siguieron los abusos y maltratos físicos.
En una ocasión, Rebeca, una de sus hijastras, trató de escapar, luego de los horrores que ocurrían dentro de la vivienda. Sin embargo, al presenciar el hecho, el “Monstruo de Iztapalapa” golpeó fuertemente a la joven con un tubo en la cabeza, razón por la que perdió la vida.
En un intento por revivir a la menor, el hombre le colocó en el pecho a Ashley, una de las bebés que habían procreado juntos, pero murió asfixiada. Ante ello, el hombre enterró ambos cuerpos debajo de la cama en la que dormía Gabriela, la otra hijastra, junto a los otros niños.
Sin embargo, ante el insoportable olor, Jorge Antonio Iniestra le pidió ayuda a su hermano, quien se llevó los cadáveres y los arrojó sobre la carretera México-Puebla.
¿Qué ocurrió con el “Monstruo de Iztapalapa”?
En 2011, Jorge Antonio Iniestra Salas, el “Monstruo de Iztapalapa”, fue detenido, luego de una denuncia interpuesta por Clara Tapia Herrera.
Por otro lado, la mujer, quien había sufrido violencia sexual y familiar durante su infancia, fue enviada al Centro Femenil de Readaptación Social de Tepepan. Sin embargo, años después, quedó absuelta de todos los cargos en su contra, ya que se consideró que ella también había sido víctima.
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Actualmente, el “Monstruo de Iztapalapa”, cuya familia sabía de sus escalofriantes actos, cumple una condena de 241 años de prisión, por los delitos de secuestro, homicidio, lesiones, corrupción de menores, explotación laboral y violencia familiar.