No hemos terminado con la recuperación del salario mínimo, hay que poner atención a la generación de empleos: Luis Miguel González
En 2025, el salario mínimo aumentará 12%, según anunció la presidenta Claudia Sheinbaum, con lo que pasará a 278.80 pesos en el país, y a 419.88 para los trabajadores en la zona fronteriza.
Al respecto, Luis Miguel González, director editorial del periódico El Economista, considera loable el aumento, aunque señala que no hemos terminado con la recuperación del salario mínimo.
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“Si consideramos que tenemos muchos retos por delante, yo diría que probablemente sea el último de los salarios mínimos que se va a poder dar al ritmo que se dieron los del sexenio pasado”.
Luis Miguel González.
El experto considera, entrevistado en Noticias en Claro, que de aquí en adelante se tendrá que tener más cuidado, aunque descarta que el aumento al salario mínimo sea inflacionario.
“Sin embargo, sí estamos viendo que hay una desaceleración en la generación de empleo formal. Estamos generando menos empleo formal, no digo que sea por el salario mínimo. El gran reto no es sólo generar empleo, sino que cada vez haya más empleo formal frente al empleo informal que por desgracia sigue siendo más de la mitad”.
Luis Miguel González.
El analista señala que en este momento la preocupación con los aumentos al salario tiene que ver con la situación de las microempresas, puesto que en las grandes, las multinacionales, no hay muchos empleados que perciban el mínimo.
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“El grupo más sensible a un aumento al salario mínimo estaría en las pequeñas empresas que son entre el 85% y 90% del país”.
Luis Miguel González.
Finalmente, el director editorial de El Economista considera que la discusión no es si los trabajadores merecen ganar más, “sino cómo le hacemos para poder pagar mejor, lo cual tiene que ver con productividad, con crecimiento económico y, eventualmente, con que el propio gobierno reduzca algunas de las cargas que tienen que ver, a veces, con gastos administrativos, de seguridad”.
El aumento al salario mínimo ayuda al consumo, en ese sentido el impacto es claro. No creo que vaya a ser inflacionario. Me parece que a la variable que hay que ponerle atención es qué va a pasar con la generación de empleo formal que, insisto, ya tiene algunos meses marcando una tendencia de desaceleración.
Luis Miguel González.
