¡Salvaron vidas! Médicas venezolanas refugiadas atendieron a mexicanos durante la pandemia
Dos médicas venezolanas refugiadas en México relataron su experiencia trabajando en hospitales públicos durante la pandemia de COVID-19. Ahora su actual labor, es atender a migrantes.
“Éste es mi centro de trabajo, es el Hospital General de Tláhuac, aquí laboré durante toda la pandemia”.
Rosmary Carolina Vieras, médica venezolana refugiada en México.
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Atención médica durante la pandemia
Rosmary Carolina Vieras, refugiada venezolana, recordó cómo en la pandemia las autoridades mexicanas buscaban médicos debido a la escasez de personal.
“En ese momento empiezan a solicitar médicos por el tema de la pandemia, por el tema de la escasez, como bien lo comentas y me postule. Bueno, nos postulamos porque en esa oportunidad fue mi amiga Iriam que insistió, mira postúlate”.
Rosmary Carolina Vieras, médica venezolana refugiada en México.
Su paisana, Iriam, también se sumó a la cruzada contra el coronavirus que puso en jaque al mundo entero. Era una forma, asegura, de devolver algo al país que las recibió, cuando huyeron de la crisis venezolana.
“Uno sale y lo más importante es poder aportar, así como inicialmente lo hice en mi país de nacimiento, y uno viene y sale igualmente a aportar, a ser alguien y ayudar a esta población que es México y que estoy muy agradecida de verdad por las oportunidades”.
Iriam González Hidalgo, médica venezolana refugiada en México.
Migrantes entre sus pacientes
Actualmente, ambas médicas continúan laborando en hospitales públicos. Una parte de su trabajo consiste en atender a migrantes que llegan al país en busca de oportunidades.
“Tenemos pacientes que son migrantes igualmente y acá los atendemos, tienen esa atención y ese servicio, acceso a la salud, tienen muchas oportunidades igual acá”.
Iriam González Hidalgo, médica venezolana refugiada en México.
Admiten que en ocasiones batallan con los estigmas sociales.
“También a veces te dicen, no es que son venezolanos, o es que son colombianos. A todos nos catalogan por igual, yo digo, pues no. No nos deben catalogar por igual, hay mucha gente preparada también en Venezuela. Incluso la primera gente que salió fueron muchos preparados”.
Rosmary Carolina Vieras, médica venezolana refugiada en México.
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El aporte de los refugiados en México
La Agencia de la ONU para los Refugiados, ACNUR, destaca lo que pueden sumar personas extranjeras como ellas, cuando reciben asilo a México.
“Creo que es un botón de muestra de las aportaciones que pueden dar las personas refugiadas, muchas veces cuando no tenemos el conocimiento o solamente vemos a las personas que están llegando a México, se puede percibir que son un problema, una carga, que se tiene que hacer digamos cargo de ellos sus propios países”.
Silvia Garduño, oficial de información pública, ACNUR – México
Actualmente, 45 mil personas refugiadas en México, aportan 236 millones de pesos en pago de impuestos anuales, como trabajadores.
Cifra que contrasta con los 51 millones 200 mil pesos, que recibió en el año 2024 la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, COMAR, la cual se encarga de atender las solicitudes de refugio.
“Hoy sabemos que las contribuciones en impuestos de estas personas, son superiores incluso al presupuesto de la COMAR, de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados, entonces nadamás por poner en perspectiva, lo que sería una contribución económica”.
Silvia Garduño, oficial de información pública, ACNUR – México
¡Salvaron vidas!
Rosmary e Iriam, forman parte de las historias que podrían multiplicarse en México, ante la posibilidad de que las puertas de Estados Unidos se cierren, para más solicitudes de asilo.
“Quizá actualmente la gente que está saliendo, no es esa misma persona que tiene la capacidad de superación, o que tuvo capacidad de estudiar una profesión como yo, pero no siguen siendo malas personas”.
Rosmary Carolina Vieras, médica venezolana refugiada en México.
Las historias de Rosmary e Iriam reflejan el potencial de quienes llegan a México buscando refugio, aportando con su trabajo al país que les abrió las puertas.
“La verdad es que sí estoy agradecida con México”.
Iriam González Hidalgo, médica venezolana refugiada en México.
