La secretaria de Relaciones Exteriores, Alicia Bárcena, informó que México envió por tercera vez una nota diplomática al Gobierno de Estados Unidos (EU), para protestar contra las boyas colocadas en el Río Bravo por el gobierno de Texas que encabeza Greg Abbott.
La canciller mexicana detalló que la nota se envió el pasado jueves 17 de agosto. La mayoría de las boyas instaladas sobre el río Bravo se encuentran en territorio mexicano, según determinó la Comisión Internacional de Límites y Aguas.
“Estamos esperando la decisión de la Corte Federal, que decida que se retiren las boyas, es lo que estamos pidiendo. Esperamos que la decisión sea el retiro de las boyas”, apuntó.
La diplomática dijo que se realizará una nueva inspección en la zona para verificar la situación de las boyas y confió en que la próxima semana, la justicia federal estadounidense ordene el retiro de la barrera.
“Estamos mandando una misión, nuevamente de inspección a la región, a Eagle Pass y esperamos que la decisión de la Corte sea el retiro de las boyas”, apuntó.
¿Por qué México pide el retiro de boyas en el Río Bravo?
En julio, el Gobierno de México envió dos notas diplomáticas para acusar que Texas violó los tratados bilaterales de aguas y derechos humanos por la instalación de las boyas en el Río Bravo para evitar el flujo de migrantes.
Incluso, el Departamento de Justicia de EU también presentó una demanda contra el Gobierno de Texas para que quite estas barreras porque violan la Ley de Apropiación de Ríos y Puertos y porque se construyó una estructura sin autorización del Cuerpo de Ingenieros del Ejército de EU.
No obstante, Greg Abbott sigue señalando en sus redes sociales que los habitantes de Texas son los más afectados por las políticas de frontera abierta de Joe Biden.
El próximo martes 22 de agosto se llevará a cabo en la ciudad de Austin, Texas, una audiencia para determinar si el muro flotante de boyas en el Río Bravo debe ser retirado, mientras se lleva a cabo la demanda judicial.