Por unanimidad de 472 votos, el Pleno de la Cámara de Diputados aprobó el dictamen a la Ley General de Salud, con lo que se prohíbe añadir las llamadas grasas trans a los alimentos durante su proceso de elaboración industrial.
A través de un comunicado, la Cámara de Diputados explicó que, con esto, se modifica el artículo 216 Bis de la Ley General de Salud.
“El Pleno de la Cámara de Diputados aprobó, por unanimidad de 472 votos, el dictamen a la minuta que adiciona el artículo 216 Bis a la Ley General de Salud, para establecer que los aceites y grasas comestibles, así como los alimentos y bebidas no alcohólicas, no podrán contener en su presentación de venta al público aceites parcialmente hidrogenados, conocidos como grasas trans, que hayan sido añadidos durante su proceso de elaboración industrial”.
Comunicado
De acuerdo con lo dado a conocer por las autoridades, “los alimentos, bebidas no alcohólicas, aceites y grasas no podrán exceder dos partes de ácidos grasos trans de producción industrial por cada cien partes del total de ácidos grasos”.
Tras la aprobación, el dictamen será remitido al “Ejecutivo Federal para sus efectos constitucionales”. Destaca que será la Secretaría de Salud la dependencia encargada de establecer “las bases de regulación para estos ácidos de producción industrial en los términos de este precepto”.
¿Por qué son dañinas?
De acuerdo con lo dado a conocer por las autoridades, el consumo de las llamadas grasas trans “aumenta considerablemente el riesgo de muerte por cualquier causa en 34% y por cardiopatías coronarias, en 28%”.
Luego de aprobado, por unanimidad el dictamen, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, celebró la decisión de los diputados, afirmando que se da “un paso importante en la atención a la epidemia de enfermedades no transmisibles”.
¿Qué son las grasas trans?
De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina, las grasas trans son, de todas las grasas, “la peor para la salud” y se producen durante la fabricación industrial de alimentos.
Por su parte, la Organización Panamericana de la Salud destaca que “las grasas trans de producción industrial son compuestos artificiales nocivos que están presentes en diferentes alimentos, grasas y aceites”.
Y afirma que “la eliminación de las grasas trans de los alimentos y su sustitución por alternativas más saludables es viable y está teniendo lugar en muchos países de ingresos elevados”.
