Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), negó que el político René Bejarano aparezca en la investigación sobre una banda de rumanos, luego de que una nota periodística lo vinculó a dicha mafia radicada en el estado de Quintana Roo.
Mediante su cuenta de Twitter, el doctor Santiago Nieto, de la UIF, negó que en las investigaciones de la Unidad de Inteligencia apareciera René Bejarano con la banda rumana dedicada al blanqueo de dinero.
“Respecto a lo publicado en un medio de comunicación, en la investigación de la UIF, así como en el bloqueo y en la denuncia que presentaremos esta semana contra la banda de rumanos y mexicanos clonadores de tarjetas, se aclara que no aparece René Bejarano en ningún momento”.
La banda rumana y el blanqueo de dinero
La semana pasada el titular de la UIF, de la Secretara de Hacienda y Crédito Público, informó que se ordenó bloquear 79 cuentas de personas físicas y morales, tanto de mexicanas como de rumanos, que se dedicaban a falsificar tarjetas bancarias.
Derivado de colaboraciones en investigaciones, la UIF logró identificar a una mafia integrada principalmente por sujetos de nacionalidad rumana y mexicana que tienen como centro de operaciones Cancún, Quintana Roo.
La “Operación Caribe” detecta y realiza el desmantelamiento de organizaciones criminales que utilicen el sistema financiero mexicano para blanquear recursos provenientes de actividades ilícitas, detalló Santiago Nieto Castillo.
En ese sentido, investigaciones de la UIF detectaron que la mafia rumana tiene extensiones en otras zonas turísticas de la República Mexicana, como la Riviera Nayarita, los Cabos y Puerto Vallarta.
La UIF analizó operaciones inusuales, transferencias y recepciones interbancarias nacionales e internacionales, emisiones y recepciones de cheques, donde detectó a la mafia rumana en México.
“Por acuerdo del gabinete de seguridad nacional del Gobierno del Pdte @Lopezobrador_, bloqueamos a 79 personas físicas y morales de un grupo delictivo con personas de nacionalidad rumana y mexicana, que se dedicaban a clonar tarjetas de crédito y débito en los destinos turísticos”.