La Secretaría de Salud federal considerará las clases presenciales como una actividad esencial para que continúen, aun cuando el semáforo por riesgo de coronavirus se encuentre en color rojo, en cualquier entidad del territorio nacional.
“Ése es el ajuste que vamos a hacer, para distinguir que el sector educativo tiene una alta prioridad, análogo y, de hecho, conceptualmente el mismo de las actividades esenciales que habíamos considerado en la jornada de sana distancia. Esa connotación va a tener: es una actividad esencial, de modo que no está sujeta a restricciones, aun cuando tengamos el semáforo rojo”.
Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud
En la reunión semanal con gobernadores y gobernadoras, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, anunció que el ajuste fue acordado con la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el cambio obedece al actual semáforo.
“El semáforo en este momento vigente, que presentamos públicamente hace un par de semanas y se publicó en el Diario Oficial hace unos días, requiere que liberemos la posibilidad legal de la SEP de poder llamar a las aulas cuando se tiene semáforos superiores a amarillo”.
Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud
López Gatell señaló que no existe una demostración que apunte a que la apertura de las escuelas origine grandes brotes, y puso como ejemplo el regreso a clases presenciales en los países de Europa Occidental, Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos y Canadá.
Junto con la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, López-Gatell aclaró que aún no hay evidencia científica que demuestre que la variante Delta del virus Sars-CoV-2 cause una enfermedad más grave, lo que sí es consistente, dijo, es que es más contagiosa.