El empresario Carlos Ahumada llegará a México el próximo martes por la mañana, tras ser extraditado por Argentina. Aunque una vez en nuestro país no podrá ser detenido por las autoridades, según acotó su abogado.
Asimismo, mientras su detención y traslado a la capital mexicana fueron solicitados por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) por el delito de defraudación genérica, su defensa alegará que la sanción ya prescribió, por lo que deberá seguir en libertad.
Ello, tras su detención en junio pasado en Panamá por elementos de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), cumplimentando una ficha roja para su localización. Mientras que la detención se llevó a cabo por una alerta azul. La cual se realiza para “conseguir más información sobre la identidad de una persona, su paradero o sus actividades delictivas en relación con una investigación penal”.
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¿Carlos Ahumada seguirá en libertad una vez en México?
Y es que según acotó su abogado, Enrique Ostos, durante una entrevista radiofónica con Azucena Uresti, a Ahumada Kurtz, relacionado con el videoescándalo que involucró al entonces secretario particular de Andrés Manuel López Obrador, René Bejarano, ya se le absolvió del fraude fiscal por un juzgado en 2007.
Sin embargo, agregó que la orden de aprehensión en su contra, en el marco de la cual el empresario pidió su traslado a México, tiene que ver con una revisión judicial hecha a su caso, en la que una sala revocó la absolución y lo sancionó por fraude, que apelarán argumentando la prescripción.
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Con dicha revisión, el Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (ahora TSJCDMX), lo sentenció en 2009 a 5 años de cárcel y dos multas de 22 mil 620 pesos por fraude genérico y fraude genérico continuado a las entonces delegaciones Gustavo A. Madero y Tláhuac, por 29 millones de pesos.
Se le busca desde 2019 por haber dejado el país entre su absolución y la revisión, sin cumplir la condena, de la que sólo le restaría poco menos de dos años, luego de que estuvo más de tres años preso durante el proceso en su contra.
Respecto a su situación judicial a su regreso al país, el abogado destacó que, aunque Ahumada sigue en calidad de imputado, el amparo concedido en junio pasado por una jueza impide a la FGJCDMX aprehenderlo una vez en México. Aún así deberá presentarse como imputado ante las autoridades.
Ante ello, descartó que la fiscalía capitalina intente detenerlo a su llegada al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), pues violar la suspensión vigente conllevaría sanciones para quien ejecute la aprehensión.
“Sería muy grave por parte de la autoridad (que detengan a Carlos Ahumada) porque violar una suspensión que está vigente implica diversas sanciones, entre ellas destitución e inhabilitación del cargo, por lo que espero que se respete la suspensión”
Enrique Ostos / abogado de Carlos Ahumada
Agregó que, una vez en la capital del país, tanto el empresario como su abogado se presentarán ante las autoridades judiciales. Allí presentarán la prescripción de la sentencia y pedirán el sobreseimiento del caso. Tras lo cual se prevé que el argentino con nacionalidad mexicana continúe en libertad para volver a su casa y descansar el mes que pasó en la cárcel, además de practicarse un chequeo médico.
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Sobre el proceso de extradición de Carlos Ahumada
Según reportes, Carlos Ahumada abordará un avión comercial este lunes 15 de julio a las 23:25 hora local en el Aeropuerto Internacional Ezeiza, en Buenos Aires, Argentina. Llegará al AICM alrededor de las 6:00 horas del martes.
De igual forma, según la resolución judicial del Juzgado Criminal y Correccional Federal 9 de Argentina, difundida por diversos medios, las autoridades sudamericanas entregarán a Ahumada a dos oficiales de la Policía Federal Ministerial de la Fiscalía General de la República (FGR) adscritos a la Interpol. Ellos se encargarán de escoltarlo durante el viaje de regreso.
En tanto que, debido a la suspensión judicial, el empresario deberá poder moverse en libertad por el territorio mexicano una vez en el país, y tras su presentación como imputado ante el juez de enjuiciamiento.
