En punto de las 7 de la mañana de este 16 de septiembre, reunidos, los pilotos de la Fuerza Aérea Mexicana afinaban los últimos detalles para sobrevolar la Ciudad de México (CMDX).
“Para las operaciones programadas las condiciones son favorables”, destacaban antes de emprender su misión: conmemorar los 113 años de la independencia de México, volando por los cielos de la capital del país.
Las aeronaves ya aguardaban en la pista, una vez que los pilotos estuvieron adentro las puertas de los aviones se cerraron.
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En los preparativos previos al despeje, la puerta de un avión “Spartan” fue cerrada. La compuerta de la aeronave fue resguardada por tripulantes de la Fuerza Aérea Mexicana.
En punto de las 10:43 de la mañana de este 16 de septiembre, “Spartan” cerraba su compuerta y comenzaba a tomar fuerzas para despegar.
Una vez en el aire, del “Spartan” se veía a quienes nos acompañarían en todo el recorrido: Detrás de él, “Hércules”. A lo lejos, seis aviones llamados “Texanos” comenzaron a completar la formación que sobrevoló el Zócalo de la Ciudad de México.
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Durante 30 minutos, “Texanos”, “Hércules” y “Spartan” volaron sobre el Lago de Texcoco en formación.
La espera terminó y “Spartan”, acompañado de los “Texanos” y “Hércules” sobrevolaron la plaza de la Constitución. Una estela de humo blanco coloreó el cielo en el desfile militar del 16 de septiembre.
A tan solo 8 mil 300 pies sobre la tierra, “Spartan” lució en el cielo de la Ciudad de México. El piloto de “Hércules” daba el visto bueno: Misión cumplida.