A una semana de que estalló la guerra civil en Sudán, cinco mexicanos fueron evacuados del país africano con ayuda de España, según informó el canciller Marcelo Ebrard, mientras que otra connacional lo hará este lunes.
Este domingo, a través de sus redes sociales el secretario de Relaciones Exteriores informó que los cinco mexicanos lograron salir de Sudán con dos familiares en un vuelo organizado por España para sus connacionales.
A la par, agregó que este lunes 24 de abril una sexta mexicana saldrá del país en guerra con la ayuda de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), luego de que el Aeropuerto Internacional de Jartum, en la capital sudanesa, fue de las primeras instalaciones afectadas por el conflicto armado.
Asimismo, Ebrard Casaubón expresó a su homólogo español “nuestra gratitud al Canciller José Manuel Albares Bueno por su apoyo” en la extracción de connacionales.
Por su parte, el canciller español apuntó a cerca de las 15:00 horas de México que acababan de despegar de Jartum los dos aviones del Ejército del Aire y del Espacio con sus connacionales, su embajador y personal diplomático, además de varios ciudadanos europeos y latinoamericanos, entre los que figuran los mexicanos.
En tanto que el sábado Jordania, Arabia Saudita, Kuwait, Estados Unidos y Francia extrajeron a sus ciudadanos en Sudán a bordo de aeronaves militares, toda vez que Gran Bretaña y China esperan a que los enfrentamientos disminuyan para poder sacar a sus connacionales de manera segura.
¿Qué pasa en Sudán?
Y es que desde el sábado 15 de abril el Ejército y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) se disputan el control del gobierno, con enfrentamientos armados en diversas localidades, entre las que destaca Jartum, la capital, donde los rebeldes han atacado diversas instalaciones oficiales, entre ellas el aeropuerto y las sedes de varias dependencias.
Ello, luego de que en 2019 ambas fuerzas se unieron para realizar el golpe de Estado que derrocó al dictador islamista Omar Hassan al-Bashir, cuando se integró un gobierno de transición conformado por el Ejército y civiles, que fueron derrocados por el general Abdel Fattah al-Burhan durante un segundo golpe en 2021, también apoyado por las RSF.
Sin embargo, el jueves 13 de abril las Fuerzas Armadas alertaron a la población por la movilización no autorizada de elementos de las RSF, con gran poder armamentístico y de movilización, además de estar integradas por alrededor de 100 mil efectivos, estallando el conflicto unos días más tarde.
En tanto que, aunque anteriormente eran aliados, la integración de las RSF a las Fuerzas Armadas sudanesas, con lo que deberían ceder al gobierno de facto el control de las minas, así como de su rica producción de oro, habría sido lo que causó esta nueva guerra civil, en un país que esperaba el llamado a elecciones para conformar un gobierno democrático.