Te contamos los detalles del divorcio entre Sofía Vergara y Joe Manganiello y la pelea por la custodia de su perro, algo que ha complicado el tema.
A mediados de julio, la actriz Sofía Vergara y Joe Manganiello anunciaron su divorcio tras siete años de matrimonio, esto a través de un comunicado publicado por el sitio de entretenimiento Page Six.
“Hemos tomado la difícil decisión de divorciarnos. Como dos personas que se aman y se preocupan mucho, pedimos cortésmente que se respete nuestra privacidad en este momento mientras navegamos por esta nueva fase de nuestras vidas”,
señala el comunicado.
Pero parece que los problemas continúan pues deben resolver un acuerdo que está frenando el divorcio, esto de acuerdo con fuentes cercanas a la pareja y a reportes de ‘US Weekly’.
Lo que frena el divorcio es definir la custodia de su pequeño Bubbles, un cachorro de Chihuahua que ha estado con ellos desde hace años y que no pueden decidir quién se lo queda.
El perro es la adoración de la colombiana, quien no estaría a dejarlo con su ex pareja, quien también ama a su perro.
La fuente cercana a los artistas mencionó que tienen que resolver el tema de la custodia de su perro, lo que se ha dicho es que Vergara quiere que las cosas se resuelvan de manera pacífica.
“Sofía espera que puedan superar esto de una manera tranquila y justa”,
dijo el informante.
De acuerdo con TMZ, el actor solicitó el divorcio desde el pasado 2 de julio asegurando que la causa se debe a “diferencias irreconciliables”, pero referente a sus bienes, dejaron un acuerdo prenupcial firmado antes de la boda.
En noviembre de 2015 aceptaron que cada uno se quedaría con sus propias cosas en caso de un divorcio, ya que tenían todo por separado. Se dijo que la colombiana no tenía intenciones de impugnar el acuerdo, por lo que lo único que se pelea es la custodia del peludito.
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Custodia de las mascotas
En México las mascotas eran consideradas por el Código Civil como bienes muebles, al ser “como un objeto” que le pertenece a un propietario, pero con la Ley de Protección y Derechos de los Animales los peludos pasaron a ser “seres que sienten”.
Esto para dar obligaciones a las familias con mascotas y para las parejas con un animal en común que se quieren separar.
La mascota deberá quedarse con quien figuraba como propietario, pero se debe considerar lo siguiente:
“El destino de los animales de compañía, en caso de que existan, teniendo en cuenta el interés de los miembros de la familia y el bienestar del animal; el reparto de los tiempos de convivencia y cuidado si fuere necesario, así como las cargas asociadas al cuidado del animal”,
señala la Ley.
Aunque lo principal es llegar a un convenio de mutuo acuerdo para regular quién se lo queda y cómo van a ser los cuidados.