Si una pareja tiene perros o gatos en el hogar, pero se separan, entonces ¿quién se queda las mascotas en un divorcio? Sin duda dependerá el país o las circunstancias, pero resulta que en “viejo continente” un perro obtiene pensión de manutención, por que sí, sus humanos por desgracia tuvieron que divorciarse, y en lugar de ser un perjudicado, este lomito al menos seguirá siendo bien atendido.
¿Un perro obtiene pensión de manutención?
Si lees que un perro obtiene pensión de manutención, obviamente te llamará la atención sin importar dónde vivas. Mientras tanto, qui te damos algunos de los por menores más importantes que han llegado hasta nuestro país.
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Y es que resulta que dos personas se divorciaron en España, y al realizar la división de bienes, también iba incluido un lomito, quien contó con la enorme ayuda de la autoridad europea, pues un juzgado en Vigo dictaminó que la mascota debía recibir una pensión de 40 euros cada mes, esto para que sean cubiertas sus necesidades básicas, es decir la comida o alimentos que debe ingerir día con día para tener una buena calidad de vida.
Obviamente, cada caso es diferente, y aquí las circunstancias arrojaron que la custodia del lomito quedaría a cargo de la mujer; sin embargo, tras la investigación del caso, también se verificó que el hombre tenía la facilidad de contar con más recursos económicos, por lo que se determinó que sería él quien cubriría los 40 euros (algo como 732 pesos, según el tipo de cambio del día).
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Dicha cifra, también se especificó que, sería revisada año con año para ver si habría alguna actualización para el monto. Y aunque sabemos que 732 pesos, o 40 euros no son suficientes, se podría creer que al final se tendrían que cubrir las necesidades más importantes del can, ya que está claro que el dinero parecería un tanto insuficiente.
Sin duda alguna, la historia de este perro que obtiene pensión de manutención deja en qué personar, sobre todo en quienes viven con su pareja y tienen mascotas, ya que si la relación se terminara (por diferentes circunstancias), no sólo hay que pensar en bienes materiales o en los hijos, sino en los animales que tanto aman la compañía de sus humanos.
