El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, es alguien que ama y presume a sus perritos; sin embargo, uno de los lomitos salió bastante inquieto, pues Commander es el perro de Biden que prácticamente tiene entre ceja y ceja a los miembros del Servicio Secreto, pues al parecer los ha mordido al menos en 10 ocasiones.
¿Qué se sabe de los ataques del perro de Biden?
De hecho, este martes la Casa Blanca dijo que la Primera Familia ya estaba “trabajando en formas” para resolver el problema de mordidas de Commander, el cual es un pastor alemán de casi 2 años.
Este travieso lomito ha tenido como objetivo al Servicio Secreto, y en su más reciente ataque, incluso terminó enviando al hospital a uno de estos agentes, según ABC News.
Los incidentes de “comportamiento agresivo” del perro de Biden se vieron reflejados en correos electrónicos del Servicio Secreto y fueron obtenidos por un organismo de control conservador, según el New York Times.
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El perrito anterior de los Biden, Major, dejó la Casa Blanca en marzo de 2021 después de un incidente de mordedura similar y la Primera Familia le dio la bienvenida a Commander como el miembro más nuevo de la familia ese mismo año.
¿Cuál es la historia Commander?
A finales de 2021, Commander llegó siendo un cachorro con los Biden; pasó parte de la víspera de Navidad (24 de diciembre) en el césped de la Casa Blanca jugando y corriendo tras de una pelota. Desde temprana edad se le vio el característico pelaje entre color negro y café, con un suave tono en el área del pecho.
El perro de Biden fue un regalo del hermano y la cuñada del mandatario estadounidense, tras cumplir 79 años, así lo informó en su momento el vocero de la primera dama Michael LaRosa. Desde entonces, “Commander” acompaña al presidente de Estados Unidos y la primera dama Jill Biden en algunos actos.