Greyfriars Bobby fue un famoso Skye Terrier que vivió en Edimburgo, Escocia, a mediados del siglo XIX, y aunque no lo creas, este fue el perro que tuvo derecho a votar antes de que las mujeres pudieran hacerlo.
- ¿Quieres saber la razón por la que un can se ganó este derecho? En Unotv.com te vamos a contar su historia.
¿Quién es Greyfriars Bobby?
Fue el perro de John Gray, un policía de Edimburgo que murió en 1858. Después de la muerte de su humano pasó los siguientes 14 años de su vida durmiendo en la tumba de su amado compañero, en el cementerio de Greyfriars.
- La gente del lugar se encariñó con Bobby y le proporcionó comida y refugio durante todos esos años.
La historia del perro que tuvo derecho a votar antes que las mujeres se hizo famosa en todo el mundo y su tumba se convirtió en una atracción turística popular. También se erigió una estatua de bronce en su honor en la calle.
Al igual que Hachiko, este can se ha convertido en un símbolo de la lealtad y el amor incondicional que las mascotas pueden tener por sus dueños.
- Su historia ha sido contada en libros, películas y programas de televisión.
Edimburgo le otorga el título de Ciudadano Honorífico
Greyfriars Bobby fue nombrado Ciudadano Honorífico de Edimburgo en 1867 por la lealtad a su dueño y por el afecto que la gente de la ciudad le tenía.
- Se trata de un título simbólico que se otorga a personas y animales que han hecho una contribución significativa a la ciudad.
¿Por qué el perro que tuvo derecho a votar antes que las mujeres?
En 1867, el título de “Ciudadano Honorífico” de Edimburgo otorsgaba algunos de los siguientes beneficios, derechos y obligaciones:
- El título confería un alto grado de prestigio y reconocimiento público
- Los ciudadanos honoríficos podían participar en ceremonias oficiales y actos públicos organizados por la ciudad
- Podían tener acceso a ciertos privilegios y servicios exclusivos, como entradas gratuitas a ciertos eventos, acceso a ciertos edificios públicos o exenciones fiscales
- Los ciudadanos honoríficos tenían derecho a usar las armas de la ciudad, como parte de su escudo de armas personal
- Podían votar en las elecciones municipales de la ciudad
No había obligaciones legales asociadas con el título de ciudadano honorífico; sin embargo, se esperaba que aquellos que recibieran el título continuaran contribuyendo positivamente a la ciudad y al país, y que actuaran como embajadores de Edimburgo en su trabajo y vida cotidiana.
La primera vez que las mujeres tuvieron derecho a votar en todo el mundo
El primer lugar del mundo en el que las mujeres tuvieron derecho al voto en igualdad de condiciones que los hombres fue Nueva Zelanda, el 19 de septiembre de 1893. Nueva Zelanda se convirtió en el primer país en aprobar el sufragio femenino después de una intensa campaña liderada por mujeres activistas, incluida Kate Sheppard.
El derecho al voto para las mujeres en Edimburgo y en todo el Reino Unido se otorgó en etapas. En 1918, se aprobó la Ley de Representación del Pueblo en el Reino Unido, que otorgó el derecho al voto a mujeres mayores de 30 años que cumplían ciertos requisitos de propiedad o matrimonio, así como a todos los hombres mayores de 21 años.
No fue hasta 1928 que se aprobó la Ley de Igualdad de Representación en el Reino Unido, que extendió el derecho al voto a todas las mujeres mayores de 21 años en igualdad de condiciones que los hombres.
En Edimburgo obtuvieron el derecho al voto en 1918, pero solo si cumplían los requisitos específicos de la Ley de Representación del Pueblo, y en 1928, cuando todas las mujeres mayores de 21 años obtuvieron el derecho al voto en igualdad de condiciones que los hombres.
Tuvieron que pasar 51 años desde que Greyfriars Bobby fue nombrado Ciudadano Honorífico de Edimburgo y tuviera derecho a “votar” hasta que las mujeres de dicha zona pudieran hacerlo.
¿Cuándo fue la primera vez que las mujeres votaron en México?
Las mujeres votaron por primera vez en México en las elecciones federales de 1955, el 3 de julio; sin embargo, las mujeres ya tenían derecho a votar en las elecciones municipales en algunas partes del país, como Yucatán, desde 1923.
La lucha por el derecho al voto femenino en México fue liderada por mujeres como Hermila Galindo, Elvia Carrillo Puerto y Juan Belén Gutiérrez de Mendoza. Estas mujeres lucharon por décadas para lograr que las mujeres fueran reconocidas como ciudadanas plenas y tuvieran los mismos derechos que los hombres, incluido el derecho al voto.
El 17 de octubre de 1953, el presidente Adolfo Ruiz Cortines promulgó las reformas constitucionales que otorgaban a las mujeres el derecho a votar y ser votadas para puestos de elección popular.
Estas reformas entraron en vigor el 1 de enero de 1954, por lo que las mujeres pudieron votar por primera vez en las elecciones federales de 1955.
La participación de las mujeres en la vida política de México ha ido en aumento desde entonces; en la actualidad, las mujeres representan el 49% del electorado mexicano y el 31% de los puestos en el Congreso de la Unión.
El perro que tuvo derecho a votar antes que las mujeres pudo “gozar” del beneficio 88 años antes de que las mexicanas lo ejercieran.
