Pebbles, la perrita que cobró notoriedad en el mundo entero por ser la más longeva del mundo, ha muerto. La canina, quien vivía en el sureste de Estados Unidos, tenía 22 años.
La trágica noticia fue dada a conocer el miércoles de la semana pasada en la página de internet del libro Guinness de los récords, que recogió su historia y la viralizó en este año.
Te recomendamos: Por esto es que aúlla tu perro, algunos consejos para que lo entiendas mejor
Pebbles, la fox terrier que se alimentaba con comida para gatos
La hembra, de la familia de los fox terriers, era alimentada desde 2012 con comida para gatos por sus dueños, lo que quizá contribuyó a su longevidad.
“Pebbles, el perro más viejo del mundo, lamentablemente falleció de manera natural y en paz en su casa y rodeada de su familia”.
Dueños de Pebbles en Instagram.
También puedes leer: Cuidado: si tu gatito tiene estos síntomas, podría quedar ciego
La perra nació el 28 de marzo del 2000 en Long Island, en el estado de Nueva York, y vivió la mayoría de su vida en Carolina del Sur. La hembra de pequeño tamaño parió 32 cachorros en total.
Pebbles fue nombrada el perro más viejo del mundo en mayo de 2022 por expertos del libro Guinness.
Según su dueña, Julie Gregory, el secreto de la buena salud de su mascota residía en el aseo de la perra, que realizaba “con la mayor atención”.
Sigue leyendo: Es viuda, tiene 22 años y le gusta la música country: Pebbles es la perrita más vieja del mundo
¿Cuánto viven, por lo regular, los perros?
En un texto publicado en la Gaceta UNAM, la máxima casa de estudios detalla que la tenencia de un perro, o gato, es benéfica para la salud de sus dueños e, incluso, hay investigaciones hechas en personas de edad avanzada que demuestran que la posesión de una mascota les permite incorporar “mejores esquemas de movimiento y tener una sensación de ocupación y bienestar general”.
Dado lo anterior, es necesario pensar en la edad y tamaño de los perros cuando son adoptados o adquiridos por personas adultas mayores. De acuerdo al especialista Hugo Sánchez Castillo, citado en la misma publicación, las razas recomendables para personas en edad avanzada son aquellas que sean pequeñas.
El académico e investigador de la Facultad de Psicología detalla que los canes de razas grandes viven entre ocho y 10 años y los de razas pequeñas entre 15 a 17 años, aunque recomienda, también, acoger a un gato, pues estos pueden llegar a vivir 20 años o más, “es decir, sus posibilidades de dar una compañía más duradera son mayores”.